La EMSHI instalará placas fotovoltaicas en tres depósitos de agua de Valencia
El IDAE le ha concedido el 100% de la subvención para instalar estos paneles que dejarán de emitir a la atmósfera 153 toneladas de dióxido de carbono
El Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), adscrito al Ministerio de Transición Ecológica, ha concedido a la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI) el 100% de las subvenciones solicitadas para la instalación de placas fotovoltaicas sobre tres depósitos de agua potable, que permitirán dejar de liberar a la atmósfera 153 toneladas de dióxido de carbono.
La resolución favorable a la EMSHI, conocida esta misma mañana, supone que la entidad metropolitana recibirá 237.525 euros, lo que supone el 50% de la inversión total que se va a realizar con este proyecto.
Concretamente, la previsión es instalar 472 paneles en tres puntos estratégicos con una potencia total de 180.000 watios, capaces de generar al año 293.104 kWh de energía limpia que alimentará las estaciones de bombeo.
La EMSHI colocará las placas fotovoltaicas en tres depósitos de agua potable, todos ellos situados en el término municipal de Paterna y desde los que se abastecen múltiples municipios del área metropolitana. En concreto, las instalaciones se realizarán en la cubierta del depósito de agua de 6.000 m3 ubicado en el Parque Tecnológico; en la cubierta del depósito más grande que posee esta entidad, con una capacidad de 40.000 m3 y que alimentará el bombeo que llevará agua hasta San Antonio de Benagéber; y en el depósito de la Coma, de 5.000 m3.
“Que el IDAE conceda a la EMSHI toda la ayuda económica solicitada para estos proyectos es la confirmación de que desde la entidad impulsamos iniciativas con una mirada medioambiental y centrados en la eficiencia energética”, ha explicado la presidenta de la entidad metropolitana, Elisa Valía, quien ha añadido que “el camino trazado está alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Agenda 2030”.
En esta línea, Valía ha recordado que “en la EMSHI se trabaja desde un prisma verde y la apuesta es seguir abasteciendo de agua potable a València y su área metropolitana dando pasos que reduzcan la huella de carbono y que contribuyan a la transición ecológica hacia una economía descarbonizada”.
La instalación de las placas de energía renovable en estos tres puntos clave tiene evidentes beneficios medioambientales, pero también económicos, puesto que “supondrá un ahorro económico de cerca de los 30.000 euros anuales para la entidad metropolitana”, ha puntualizado Valía.
