Almàssera celebra mañana la fiesta del Corpus, dos meses después, por una dispensa papal desde el siglo XIV

Almàssera celebrará mañana, domingo, la fiesta del Corpus Christi, dos meses después de la solemnidad litúrgica, como viene siendo tradición desde que le fuera otorgada una dispensa papal tras el ‘Miracle dels Peixets’, que según recoge la tradición tuvo lugar en el siglo XIV.

“La procesión del Corpus Christi en Almàssera se ha venido celebrando desde hace siglos el cuarto domingo de agosto” y, en ella, “abrirá el recorrido el ‘tabalet i la dolçaina’ a cuyo son las ‘danses’ toman la calle”, según ha informado a la agencia AVAN el párroco Vicent Ruix Contelles.

La procesión en honor del Santísimo Sacramento tendrá lugar a las 20 horas y durante el recorrido se representarán las figuras de distintos personajes bíblicos, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento. Al finalizar la procesión se disparará un castillo de fuegos artificiales en la avenida Derechos Humanos.

La organización de la fiesta corre a cargo de los clavarios de la Confraria del Santíssim y del Grup d’Amics del Corpus d’Almàssera.

‘El miracle dels peixets’
Según recoge la tradición, en 1348 un sacerdote perdió la arquilla con las sagradas formas que llevaba a un morisco, gravemente enfermo en una alquería, al otro lado del barranco del Ca­rraixet, entre las localidades de Alboraya y Almassera. Al cruzarlo, las aguas del barranco que bajaban muy crecidas, arrastraron al sacerdote y a la cabalgadura que montaba, perdiéndose las formas consagradas que llevaba con él.

Ante este suceso, según la tradición, los vecinos, bordeando las orillas del río en busca de las sagradas formas, observaron cómo tres peces las sostenían en sus bocas. Ante aquel hecho prodigioso, el pueblo de Alboraya, con el sacerdote al frente, promovió procesiones y la construcción en el lugar de una ermita que hoy se conserva aunque muy reformada”.

La arquilla que contuvo las sagradas formas cuando se produjo el milagro en el siglo XIV sólo sale del templo parroquial en la festividad de San Vicente Ferrer para llevar la comunión a los enfermos a sus casas, y también en la procesión del Corpus que Alboraya celebra el primer domingo de julio y Almassera el cuarto domingo de agosto. Se trata de una caja pequeña destinada a contener las formas consagradas, del siglo XIII, que se conserva en la parroquia.