Trece falleras subidas a un balcón proclamando que es hora de abrir fuego…
A las 6 de la tarde del sábado 21 de febrero se concentraban las falleras mayores y presidentes de las 6 fallas de Puçol y la Junta Local Fallera, y a las 6.30 comenzaba el pasacalle por las avenidas Molí de Vent y Valencia y la calle San Juan, hasta llegar a la plaza Joan de Ribera, frente al ayuntamiento, donde las 13 falleras mayores subieron al balcón para realizar la tradicional crida que da comienzo al mes fallero.
Fue un pasacalle ruidoso, como toca. Pero algo desangelado por la falta de público: el frío y el viento invitaban a quedarse en casa y sólo los más atrevidos se animaban por las arterias del casco urbano.
Tras recorrer calles y avenidas, los representantes de cada una de las seis fallas y la Junta Local Fallera llegaron a la plaza Joan de Ribera, donde la mayoría buscó algún rincón donde resguardarse de la temperatura.
Al balcón subieron sólo las 13 falleras mayores, acompañadas de sus presidentes. Primero dirigieron unas palabras las infantiles, después las adultas y cerraron el acto la representante de la junta y la alcaldesa.
Tras las palabras de las 13 falleras mayores, una novedad de este año que dio calor, color y ruido a la crida: un castillo de fuegos artificiales desde la terraza del ayuntamiento, a cargo de Vicente Alcácer Bosch, Yoe para los amigos, puso el punto final al primer acto conjunto.
Puçol ya está en fallas.
