Todos los trabajadores municipales reciben en Navidad una taza para eliminar el consumo de vasos de plástico
Juanjo Manzaneque se preguntaba cuántos vasos de plástico consumía una institución pública como el Ayuntamiento de Puçol en un solo año. Cuando supo la respuesta, decidió tomar medidas: los 39.000 vasos de plástico anuales en las distintas dependencias municipales han dado paso a elegantes tazas de cerámica que ha regalado a los trabajadores para colaborar entre todos en el rechazo al plástico.
"El plástico es un material que en ocasiones tarda hasta mil años en descomponerse y, lo que es peor, durante ese proceso se va fragmentando en trozos cada vez más pequeños que son ingeridos por animales e incluso por el plancton, por lo que afecta a toda la cadena alimentaria", asegura el concejal de Medio Ambiente, Juanjo Manzaneque. "La solución no es reciclar, algo que se está realizando muy mal, sino rechazar el plástico y acudir a sistemas mucho más lógicos y ecológicos".
Y la teoría ha tomado forma con una taza de cerámica como regalo de Navidad a todos los trabajadores municipales, tanto del propio Ayuntamiento como de la Casa de Cultura, el Polideportivo Municipal y los distintos locales públicos distribuidos por Puçol: una taza con un llamativo eslogan diseñado por el Departamento de Comunicación, "Xicotets gestos, grans canvis: Ni gota de gots".
Con este gesto, Manzaneque espera que los trabajadores aporten su pequeño grano de arena eliminando el consumo de vasos de plástico de un solo uso, aunque para los vecinos que ocasionalmente acuden al ayuntamiento se mantendrán las máquinas con vasos.
