LA UNIÓ de Llauradors ha presentado hoy recursos de reposición contra la subida de los valores catastrales en la Pobla de Vallbona
Muchas parcelas agrícolas eran para un PAI que nunca se hizo, pese a lo cual pasan a ser urbanas con un aumento brutal
LA UNIÓ de Llauradors ha presentado hoy recursos de reposición, más de 200, en la Gerencia Regional del Catastro de Valencia ante la desorbitada subida de los valores catastrales en la localidad de la Pobla de Vallbona (Camp de Túria). La Gerencia Catastral ha de contestar en el plazo de un mes a los recursos entregados.
LA UNIÓ de Llauradors indica que en muchas localidades de la Comunitat Valenciana se ha incrementado de forma considerable el valor catastral debido a la revisión o actualización del catastro y como consecuencia el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) se ha llegado a multiplicar hasta por cinco en algunos casos. Estos aumentos tan brutales están muy alejados de la realidad del valor del suelo en la actualidad, con una crisis generalizada en todos los sectores y aún más si cabe en todo lo relacionado con los aspectos urbanísticos y con la rentabilidad de la actividad agraria.
Uno de los casos donde se ha dado esta situación es el de la Pobla de Vallbona donde han aumentado los valores catastrales entre un 200 y un 500% sobre la última revisión. Se trata de una localidad que poseía terreno agrícola y que vivió una fiebre urbanística durante los últimos años, con varios PAI que finalmente no llegaron a ejecutarse. La revisión catastral al alza supone que los propietarios deban pagar más en sus impuestos, pero a la vez posee también repercusiones fiscales-patrimoniales sobre los sujetos pasivos por el aumento del valor catastral de la propiedad afectada. Las subidas del valor catastral se han realizado teniendo en cuenta la inclusión de las parcelas en un PAI que finalmente no llegó nunca a ejecutarse y ahora pese a ello se les pretende imputar una fuerte subida.
Los recursos de LA UNIÓ plantean así que las parcelas agrícolas sean valoradas como tales en atención a la Ley del Suelo o que el valor catastral nunca sea superior al de mercado. En este último aspecto LA UNIÓ señala en los recursos que los estudios de mercado efectuados no cumplen los requisitos mínimos de objetividad exigibles, es decir, no se han hecho con datos reales del Registro de la Propiedad. Por ello los recursos presentados por LA UNIÓ para defender los intereses de los afectados insisten en la idea de “mantener los valores catastrales tal y como estaban”.
En los recursos argumenta así mismo LA UNIÓ que “muchos ayuntamientos cuando hacen simplemente un plano para construir un PAI, aunque luego no se ejecute ni disponga de los servicios adecuados, ya contemplan una parcela agrícola como urbana con su correspondiente aumento; algo que es ilógico e injusto por lo que cabe recurso”.
También ha presentado LA UNIÓ recursos de reposición por el incremento de los valores catastrales en las casas residenciales, naves, solares, etc., que los habitantes de la Pobla de Vallbona tienen en el término rural del pueblo y a los que se les ha aplicado una subida del todo inadmisible.
