Cortina: "El Ayuntamiento debe 5.400 euros en gasóleo para los coches de la policía y los colegios públicos por falta de dinero"
El consistorio acumula 660 facturas pendientes de abonar desde hace meses
El PSPV defiende la creación de una comisión formada por todos los grupos políticos y los técnicos municipales que estudie la situación de los pagos pendientes y fije un calendario con las prioridades y plazos para saldar las deudas con los proveedores y evitar, así, un perjuicio para los pequeños y medianos empresarios de la Pobla.
En total, se trata de 660 facturas pendientes de abonar a los proveedores pese a que la normativa vigente establece un máximo de 50 días como tope para satisfacer los mencionados débitos a esas empresas. Algunas de las facturas pendientes se remontan, incluso, a finales del año pasado y otras a principios del actual ejercicio económico.
Entre las facturas pendientes cabe destacar la reposición de gasolina por un importe de 5.400 euros para los vehículos de la policía local, la inspección de obras, coches oficiales y depósitos de gasóleo de algunos centros educativos, como el centro del Mas de Tous. Otros conceptos se refieren a la compra de libros para la biblioteca (301 euros); adquisición de pilas 5’4 euros) para las trabajadoras de ayuda a domicilio; bombillas (18 euros) para la casa de cultura; un teléfono inalámbrico (47 euros) para la guardería infantil; productos farmacológicos infantiles de primera necesidad (180 euros).
El portavoz socialista, Jaume Cortina, ha calificado de “deficiente” la gestión económica de la alcaldesa y su equipo de gobierno “porque su política despilfarradora basada en la contratación desmesurada en personal y en proyectos fastuosos ha provocado unos excesivos gastos fijos para los que no existen suficientes ingresos ordinarios; al final, los mayores perjudicados son los proveedores del ayuntamiento que deben pagar esa desfachatez”.
Otras deudas con los proveedores hacen referencia al servicio de peluquería del hogar del jubilado (852 euros); compra de bolígrafos, libretas y material de oficina (313 euros); una comida para la firma de un acuerdo protocolario (632 euros); productos farmacéuticos para funcionarios (1.100 euros); dulces para vinos de honor ( 350 euros); vestuario para la policía local (2.000 euros); un saco de sal para las heladas (8 euros); un pinchazo de una rueda del coche de la brigada de obras (15 euros).
Por último, otros gastos pendientes de pago son las servilletas, vasos y productos similares (3’3 euros) para una exposición; adquisición de una botella de limpiacristales (9 euros) y la compra de sobres y una lupa para la policía local (10’70 euros).
El PSPV reclama, finalmente, al gobierno del Partido Popular una racionalización de los gastos para adecuar el notable descenso de ingresos urbanísticos –principal vía de los últimos años- a los gastos públicos de forma que no se generen déficits presupuestarios para un ayuntamiento que, actualmente, padece una deuda municipal de 12 millones de euros.
