Reclusos llevan en procesión la Cruz de Lampedusa en la prisión de Picassent tras participar en una misa
En el VI aniversario de la visita del papa Francisco a la Isla de Lampedusa (Italia)
La Cruz de Lampedusa, elaborada con madera de pateras utilizadas por inmigrantes y bendecida por el papa Francisco, ha visitado el Centro Penitenciario de Picassent, donde ha sido recibida por reclusos que han rezado y han procesionado con ella tras participar en la celebración de una eucaristía.
La visita al Centro Penitenciario ha sido organizada por la Asociación San Vicente Ferrer Altar Playa- que tiene su sede en la parroquia San Vicente Ferrer del Canyamelar- coincidiendo con el VI aniversario de la llegada del papa Francisco a la isla italiana de Lampedusa en julio de 2013, su primera visita fuera de Roma tras ser elegido Pontífice.
Una vez dentro de la cárcel, la Cruz ha presidido una eucaristía tras la cual, "los internos han podido cogerla, besarla, rezar ante ella y realizar una pequeña procesión", según fuentes de la Asociación.
Esta iniciativa, “que cuenta con el respaldo y la aprobación de la Pastoral Penitenciaria del Arzobispado de Valencia, es una más de la Asociación San Vicente Ferrer Altar Playa que también ha recogido alimentos no perecederos y productos de higiene para ayudar, precisamente, a la Pastoral Penitenciaria”, han añadido.
La Cruz de Lampedusa llegó a la diócesis de Valencia en abril
La visita de la Cruz, que ha recorrido ya varias ciudades en España, ha sido organizada en la diócesis de Valencia por la parroquia San José Artesano, que este año celebra su 50 aniversario, junto con la Asociación Valenciana de Solidaridad con África (AVSA) y el Secretariado Diocesano de Migraciones, ha explicado el párroco Jesús Belda.
La cruz de Lampedusa llegó a Valencia el pasado 30 de abril a la parroquia de San José Artesano, en el barrio de la Ciutat de l ´Artista Faller, y desde allí está recorriendo distintas parroquias y localidades de la diócesis.
Precisamente, la Cruz de Lampedusa recibe el nombre de la isla italiana a donde acudió el papa Francisco en julio de 2013 en su primera visita fuera de Roma tras ser elegido, y donde días antes naufragó un barco con inmigrantes y refugiados, de los que 349 murieron.
“Aquel suceso impactó tanto al papa Francisco que un mes después decidió que su primer viaje como pontífice fuera de la ciudad de Roma, tuviera lugar precisamente a la isla de Lampedusa, puerta de entrada a Europa para muchos inmigrantes”.
El Papa la recibió como regalo por la fundación italiana Casa dello Spiritu e delle Arti (Casa del espíritu y de las artes), la bendijo y animó a llevarla por todo el mundo.
