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CSI•F afirma que Instituciones Penitenciarias no destina dinero a aumentar la plantilla y sí que gasta en inhibidores o módulos

  • El sindicato advierte del pago de 200.000 euros en Picassent por unos inhibidores retirados por ineficientes

El sindicato CSI·F denuncia la escasa dotación de funcionarios en los centros penitenciarios de la Comunitat Valenciana. La falta de presupuesto argumentada por el Ministerio contrasta, en centros como el de Picassent, con el exceso de gasto en inhibidores o en reformas del módulo de aislamiento. El sindicato reclama un refuerzo de las plantillas, cuya escasez se agudiza en Navidad por los permisos y falta de relevo.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) explica que el centro penitenciario de Picassent ha gastado 200.000 euros para instalar inhibidores de telefonía móvil que tuvieron que ser retirados por su ineficacia y sustituidos por otros con más capacidad que también han sido retirados recientemente. Por otro lado, la reforma del módulo de aislamiento supuso un gasto cercano a los 600.000 euros pese a que ha estado inutilizado más de cinco meses.

Mientras, este año Instituciones Penitenciarias únicamente ha convocado 60 plazas en toda España, un dato que contrasta con las 210 ofertadas en 2010 y las 1.124 de 2009. El Ministerio insiste en la falta de presupuesto para convocar más plazas. No obstante, en centros como Picassent se ha desperdiciado una gran cantidad de dinero de forma ineficaz, mientras que en estas fiestas navideñas solo dos funcionarios vigilarán en algunos módulos a más de 150 presos por falta de personal para cubrir las bajas y las vacaciones.

CSI·F considera “errónea” la política llevada a cabo por Instituciones Penitenciarias, que en los últimos años está construyendo más prisiones sin tan siquiera disponer de plantilla suficiente para cubrir con seguridad los centros en funcionamiento.

Esta coyuntura provoca inseguridad en los empleados públicos de prisiones y crea el caldo de cultivo para la aparición de episodios violentos por la escasa vigilancia a la que están sometidos los presos. Por ese motivo, el sindicato CSI·F reclama a Instituciones Penitenciarias que aumente la convocatoria de plazas. Del mismo modo, exige el control del gasto, y que esté adecuado a las necesidades prioritarias como son el aumento de la plantilla y la seguridad tanto de presos como de funcionarios.

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