CSI•F avisa que el personal de prácticas en Picassent se ha reducido a un tercio y que quedan 30 plazas por cubrir
El sindicato alerta de un previsible aumento de situaciones conflictivas en la prisión por la escasez de plantilla
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI•F) resalta que el recorte en la oferta de plazas de funcionarios ha derivado en una reducción en las plantillas. La cárcel de Picassent hace un año se reforzaba con 30 personas en prácticas y con la oposición recién aprobada. Este año de 30 se ha pasado a 10 prácticos.
CSI•F explica, además, que cerca de otras 30 plazas de funcionarios de prisiones están por cubrir en Picassent. Debido al sistema de retenciones y traslados de Instituciones Penitenciarias, el personal que debe cubrir estos puestos de trabajo suele agotar el plazo de tres meses para incorporarse al nuevo destino. Por ambos factores la cárcel se encuentra con una plantilla muy justa, hasta el punto de que la dirección del centro ha pedido la realización de turnos dobles para compensar la falta de cobertura de las vacantes.
La central sindical avisa que esta situación de escasez de personal provoca una sobrecarga laboral en los funcionarios de prisiones y aumenta el riesgo de que se produzcan situaciones conflictivas por la falta de vigilancia. Algunos módulos, como preventivos, juntan a presos de diferentes grados por falta de espacio en los módulos correspondientes.
El sindicato CSI•F reclama al Ministerio del Interior, y en concreto a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, la creación de más plazas de empleados públicos para evitar la reducción drástica de plantillas a la que están sometiendo a muchos centros penitenciarios. Del mismo modo, exige que se agilicen todas las incorporaciones de funcionarios que están pendientes de ser trasladados a la cárcel de Picassent para atenuar las situaciones de conflictividad.
