Perú se interesa por la arquitectura hospitalaria de la Comunidad Valenciana
Uno de los más reputados arquitectos del país andino visita La Fe, el Hospital de Dénia y el del Vinalopó
Guillermo Turza Arévalo ha diseñado más de 30 hospitales en todo el mundo
Durante esta semana ha recorrido los edificios del nuevo Hospital la Fe de Valencia, además de los recién inaugurados en Hospital del Vinalopó en Elche y el Hospital de Dénia.
Turza ha colaborado durante casi 15 años con el gobierno peruano en la evaluación de la arquitectura sanitaria de la red pública de ese país. Es también miembro de la Asociación peruana de Arquitectura Especializada en Salud y pertenece al grupo EXAIS que engloba a profesionales de distintos países de Centro América y América del Sur expertos en tecnología sanitaria.
El arquitecto peruano cuenta con una dilatada experiencia en arquitectura sanitaria. A sus espaldas lleva ya construidos más de una treintena de espacios dedicados a la salud. En la actualidad acaba de entregar la obra del Hospital de Moyobamba, en Perú; un centro sanitario de 120 camas.
El arquitecto andino ha destacado las peculiaridades que tiene su país a la hora de construir hospitales, ya que se encuentra en una zona sísmica de elevada actividad.
También ha destacado la importancia de la tecnología que, hoy por hoy, ha dicho, “condiciona al cien por cien la estructura del edificio. La importancia de la tecnología en la actualidad es de tal magnitud que no te permite restaurar. Los hospitales no se pueden construir pensando que van a ser útiles durante 50 años”.
Turza se ha interesado por la tecnología punta que ha encontrado en el hospital de Dénia y por la configuración del espacio arquitectónico como un elemento discontinúo, “sin monotonías”, ha dicho. Además, ha añadido, “es el único hospital donde he visto el arte integrado en la arquitectura con el objetivo final de humanizar el espacio sanitario”. Para Turza un hospital ha de ser “un lugar que forme parte del paciente y que el personal asistencial, los profesionales que en él trabajan, se sientan cómodos; de manera que estén en disposición de brindar salud a sus pacientes”.
En su visita al Hospital del Vinalopó ha recorrido las cuatro plantas del centro haciendo especial hincapié en el bloque quirúrgico. Para Turza, “la tecnología instalada en los quirófanos del Hospital ofrece una nueva visión de la medicina, facilitando la labor del profesional y poniendo a su alcance todo tipo de posibilidades a nivel técnico.” Turza ha valorado muy positivamente la distribución de las distintas áreas del centro que posibilitan que la circulación de los pacientes se produzca de forma ordenada. Por último, destacó la organización del Servicio de Medicina Intensiva y su particularidad a nivel arquitectónico, pues la disposición de los boxes en forma de “U” y su equipamiento permiten un control constante del paciente por parte del personal sanitario.
