El Ayuntamiento de Peñíscola en pleno solicitará la protección definitiva de la Playa Norte al Gobierno
Se elevará una petición formal al ejecutivo central a través de la declaración institucional firmada por todos los grupos políticos municipales
El litoral de la provincia de Castellón y concretamente el litoral de Peñíscola, tanto en la zona norte como en la sur, han sufrido los azotes de los últimos dos temporales conocidos como Gloria y Filomena. Lamentablemente han dejado de ser algo excepcional para convertirse en un fenómeno que ocurre con una frecuencia cada vez más corta.
Justo hace un año, el temporal Gloria causó graves destrozos en toda la costa del municipio.
La zona sur, que discurre desde el núcleo urbano hasta la urbanización Puerto Azul, se vio especialmente dañada produciéndose un importante desprendimiento del asfalto de la carretera y del hormigón de consolidación de la cuneta como consecuencia del movimiento de los bolos allí instaurado, tras el paso de Gloria. Todo ello ha provocado que el Ayuntamiento de Peñiscola deba hacer frente a un gasto de cerca de 900.000 ñ€ a fin de ejecutar las obras necesarias para su reparación.
De igual modo han sido invertidos cerca de un millón de euros para reparar los destrozos del temporal Gloria en la zona norte, tras el hundimiento de buena parte del paseo marítimo, la playa dañada y prácticamente desaparecida, las zonas de juegos infantiles, deportivas y pasarelas arrastradas, mobiliario urbano desaparecido, zonas de vigilancia y servicios de playas accesibles deteriorados o directamente destruidos.
A ello hay que añadir la inversión que el Ministerio Transición Ecológica tuvo que hacer para restablecer la playa norte de Peñíscola, en toda su extensión, actuación valorada en más de medio millón de euros.
De nuevo y prácticamente un año después, han llegado las consecuencias del temporal Filomena que, debido a las olas que sobrepasaron los 3 metros, ha causado graves daños en la costa norte de la ciudad. La playa norte de nuevo se ha visto dañada, las pasarelas arrastradas y destruidas, los servicios de accesibilidad destruidos, una vez más.
Este último temporal ha supuesto un nuevo ejemplo de la gran erosión de arena que sufre la Playa Norte, que está protagonizando un continuo retroceso "por ello debemos encontrar una solución estructural y definitiva, no sólo actuaciones coyunturales que resuelven los efectos de cada temporal" reclama el propio alcalde, Andrés Martínez, en nombre del conjunto de la corporación municipal.
Tal y como recoge la declaración institucional que se tramitará en el pleno ordinario de mañana, "existe una nueva realidad y podemos observar que estos acontecimientos y situaciones catastróficas son más frecuentes, por lo que es necesario que el Ministerio de Transición Ecológica tome nuevas y definitivas medidas que permitan evitar o cuanto menos reducir las consecuencias de estos fenómenos imprevisibles".
El texto suscrito por todas las fuerzas políticas con representación municipal, contempla la reflexión compartida de que la regresión de la costa es una "amenaza sería" y es "necesario acometer de manera inmediata actuaciones contundentes si queremos evitar que nuestras playas desaparezcan".
Así, el documento afirma que no se pueden seguir "poniendo parches" hasta el siguiente temporal, proponiendo al Gobierno la construcción de espigones o escolleras a lo largo del litoral norte del municipio, tal y como se construyeron en playas de otros municipios costeros de la provincia, con anterioridad.
Por todo ello, la declaración institucional elevará oficialmente la petición al Ministerio para la Transición Ecológica, de redactar, aprobar y publicar cuanto antes el Plan Integral de Protección de la costa de la provincia.
Además, solicita Ministerio para la Transición Ecológica que lleve a cabo una actuación integral en la playa norte de la localidad, estudiando y ejecutando medidas destinadas a paliar las consecuencias de temporales futuros. Dentro de las propuestas, se instará al Ministerio a estudiar la posibilidad de construcción de varios espigones o escolleras en toda la extensión de la Playa Norte a fin de dar una solución definitiva a la problemática que centra la reivindicación.
