El Senado aprueba por unanimidad una moción del PP que solicita la divulgación de Diseño Universal

El Senado ha aprobado por unanimidad una moción presentada por el PP en la Comisión de Ciencia e Innovación, que insta al Gobierno a divulgar, a través de campañas adecuadas, el concepto de Diseño Universal y a tomar en cuenta en la formulación de las políticas nacionales de ciencia e innovación que han de impulsar en la actividad investigadora española, los principios de diseño universal y las medidas para mejorar la accesibilidad.

Araceli Peris, encargada de defender la moción, definió el Diseño Universal como “la creación de productos y entornos realizados de modo que sean utilizables por el mayor número posible de personas, sin necesidad de ser adaptados o especializados”. “El objetivo del Diseño Universal es simplificar la vida de todo el mundo; pretende lograr que las comunicaciones y el entorno, además de poder ser utilizados por el mayor número posible de personas, se consiga hacer con el mínimo coste”.

“El Diseño Universal beneficia a personas de todas las edades y capacidades” –apuntó la senadora por Castellón- “Durante el proceso de diseño y conservación del objeto, ambiente, servicio, actividad y tecnología que vaya a utilizar o desarrollar algún ser humano, hay pensar en que debe proporcionar comodidad, conveniencia, seguridad, usabilidad y accesibilidad de forma equitativa y equivalente para cualquier persona, sin necesidad de adaptación o modificación posterior”.

Peris insistió en que la conexión entre el diseñador y el usuario debe ser “no un reto, sino el reto”. “Tiene que superar la separación física en tiempo y en espacio entre ellos; la globalización en los temas de producción; y conseguir que no haya que realizar cambios cuando llegue al usuario final”.

“Con el fin de incluir a todos los usuarios y reconociendo la diversidad de capacidades, habilidades y limitaciones, así como los posibles cambios a lo largo del tiempo –explicó la senadora popular- surge el concepto de Diseño Universal que contempla tanto a niños como a ancianos; a personas altas y bajas; a las que tienen distintas capacidades y, en definitiva, para promover la inclusión de todas las personas en todas las actividades de la vida”.

Araceli Peris finalizó su intervención añadiendo que “cuando se consideran las capacidades y limitaciones de todas las personas en el diseño de productos de uso diario y en la construcción de espacios en el diseño de actividades, estos cuentan con un valor añadido que hace más viable su comercialización al adecuarse a todo el mundo y no limitarse a un grupo de posibles usuarios de forma selectiva”.