El PSPV pide que no se cierre ninguna escuela del interior ni que aumenten las ratios para no perjudicar la educación de los alumnos
La Conselleria de Educación acaba de hacer pública una planificación escolar para el curso 2013-2014 según la cual se eliminarán cientos de aulas de educación infantil y primaria en todo el territorio valenciano. Este hecho ha llevado a la dirección provincial del PSPV-PSOE a aprobar una resolución para reclamar que no se cierre ninguna escuela del interior de la provincia de Castelló. El PSPV exige además que no se aumente la ratio y que se mantenga la ratio de 25 alumnos en Infantil y Primaria, y de 30 alumnos en secundaria para no perjudicar la educación de los alumnos, como también que no se agrave aún más el paro de los jóvenes con la reducción de las plantillas de profesores, ya que si se aplican las medidas del PP la pérdida de profesorado será alrededor del 16%. Para la secretaria de Educación de la Dirección Provincial del PSPV-PSOE, Montse Ferrer, "la eliminación de las unidades educativas son el resultado del aumento del número de alumnos por aula decidido por el Gobierno del Partido Popular". Un hecho que implicará una subida del 20% de alumnos por aula. Así, en Infantil y Primaria se pasa de un máximo de 25 alumnos a 30; en Secundaria de 30 a 36, y en Bachillerato las clases podrán tener hasta 42 alumnos. Ferrer ha señalado que "solo en la provincia de Castelló, la Conselleria suprimirá 26 unidades de Primaria, 16 de Infantil y 1 unidad de educación especial (en el colegio Pla d’Hortolans de Burriana). "La reducción de unidades implica el aumento del número de alumnos por aula y la reducción, por tanto, de la atención educativa que reciben los escolares", añade Ferrer.
Ferrer ha indicado que especialmente grave es el caso de aquellos pueblos en que se apuesta por el cierre de la escuela, como en Almedíjar y en Ludiente. "Este hecho ha provocado un grave problema a los niños que ahora deberán desplazarse a otra localidad todos los días, pero también se pone en peligro el futuro de los pueblos del interior. Porque la escuela es un elemento fundamental para mantener la vida en los pueblos y dinamizarlos culturalmente".
En este sentido, la resolución aprobada por los socialistas valora muy negativamente la propuesta de planificación escolar para la provincia, ya que supone un nuevo ataque a la calidad educativa y un paso más en la política de desmantelamiento del Estado de bienestar que está llevando a cabo el Partido Popular. Por ello, los socialistas darán todo su apoyo a los padres que, a través de la FAPA Penyagolosa han manifestado su desacuerdo y se han dirigido al Síndic de Greuges para denunciar un mapa educativo con menos aulas y más masificadas.
En concreto, perderán una unidad de primaria los colegios públicos Joan Brusca de Albocàsser, Ambaixador Beltran de Almassora, Virgen de Gracia de Altura, Mestre Catalan de Benicarló, Pare Villalonga de Borriana, Gaetà Huguet i L’Illa de Castelló de la Plana, Catí, Castellnovo, Almedíjar, Naram de Figueroles, Grangel Mascarós de l’Alcora, Jaume I de Nules, Baltasar Rull y Mestre Caballero de Onda, Escultor Ortells y Cervantes de Vila-real, San Sebastián de Vinaròs y la escuela de Ludiente. También hay escuelas donde se suprimirán dos unidades de primaria. Es el caso del colegio Cervantes-Dualde de Betxí, el Sebastián Elcano del Grau de Castelló y el Pintor Camarón de Segorbe.
En educación infantil la situación es más dramática si cabe, ya que se contempla el aumento de ratio hasta 30 alumnos para niños de tres, cuatro y cinco años. De esta manera, pierden una unidad las escuelas Santa Quitèria y Regina Violant de Almassora, Cardenal Tarancón de Burriana, Cervantes-Dualde de Betxí, Tombatossals, Blasco Ibáñez y Ejército de Castelló de la Plana, Culla, Montán, Pedro Alcázar de Nules, Jaime Sanz de Peníscola, Sant Joan de Moró, Pintor Camarón de Segorbe, Jaume I de Vinaròs y Santa Ana de Zucaina.
