Barrachina: Castellón es una de las provincias más inseguras de España

El diputado nacional del Partido Popular por la provincia de Castellón Miguel Barrachina ha afirmado hoy que “los más de 60.000 delitos denunciados y recogidos en la Memoria de la Fiscalía General del Estado de 2008 en la provincia de Castellón nos sitúan como una de las provincias con mayor índice de criminalidad de España”.

Miguel Barrachina ha realizado estas declaraciones tras estudiar la memoria de la Fiscalía General del Estado que, de nuevo y como cada año, “contradice los pocos datos maquillados que ofrece el Ministerio del Interior a través de la subdelegación del Gobierno en Castellón”.

El diputado segorbino ha apuntado que el aumento de 3.200 nuevos delitos en 2008 con respecto a 2007, según los datos de la memoria de la Fiscalía, sitúan a Castellón como una provincia “muy insegura para vivir”.

Barrachina ha recordado que mientras baja el número de delitos en Alicante y en Valencia, “en nuestra provincia aumentan en un 5,5%, muy por encima del crecimiento nacional”. Y no sólo eso, sino que, además, ha destacado que “es el cuarto año consecutivo de aumentos. Desde que el PSOE llegó al gobierno los delitos no han dejado de crecer, así desde 2004, en el que la Memoria de la Fiscalía recogía 51.832 delitos hasta 2008, con 60.856, el crecimiento es constante.”

“La Fiscalía ha desmentido con rotundidad tanto al Ministerio del Interior como a la Subdelegación del Gobierno y al PSOE, que han estado engañando con reiteración a los vecinos de Castellón con cifras sobre la reducción en el número de los delitos que son anual y puntualmente desmentidos por la Fiscalía”, ha afirmado el diputado popular.

En este sentido, Barrachina ha mostrado su preocupación “tanto por la creciente inseguridad en Castellón como por el engaño de nuestras autoridades y la autocomplacencia en la que viven el Ministerio que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba y sus extensiones provinciales. Llama la atención que una provincia que aspira a ser un referente turístico internacional, tenga que soportar más de 10.000 delitos de robo con fuerza en las cosas en un sólo año”.

El parlamentario popular ha añadido que además del daño directo a las personas que padecen la creciente delincuencia de Castellón, existe un “perjuicio indirecto” sobre la economía provincial, tanto en la vertiente turística y el resto del sector servicios, como en la industrial, y en nuestra agricultura. Las empresas que se desean instalar en Castellón no deben tener a la delincuencia como un coste adicional a la hora de abrir una empresa en la provincia. Solo la profesionalidad y efectividad de la Guardia Civil y la Policía Nacional evita una situación insostenible.

Por todo ello, Barrachina cree que “el gobierno socialista debería dejar de presionar a Policía y Guardia Civil para que maquillen los datos sobre el número de delitos –que contrastan enormemente con los ofrecidos por la Fiscalía- y preocuparse por cumplir sus promesas sobre construcción de cuarteles y comisarías, así como el aumento del número de efectivos reales y permanentes, para que Castellón no sea tan solo un lugar de paso hacia otros destinos”.