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Gisbert exige a Fabra explicaciones por el daño a la imagen de Castelló que está provocando la fracasada gestión del aeropuerto

  • El portavoz adjunto pregunta al presidente de la Generalitat “quién va a pagar el aeropuerto del abuelo” tras la decisión de la concesionaria de llevar a los tribunales al Consell para cobrar lo que le debe por las obras

El portavoz adjunto del grupo socialista en la diputación, Josep Gisbert, ha exigido al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, al presidente de Aerocas, Carlos Fabra y al propio presidente de la diputación, Javier Moliner, explicaciones por el daño a la imagen de Castelló que está provocando su fracasada gestión al frente del aeropuerto, que, desde el mismo día de la inauguración, se ha convertido en el hazmerreir no solo de los medios de comunicación españoles, sino incluso de toda Europa y, el responsable, no es otro que un PP que ha gestionado este proyecto de forma ineficiente, improvisada y temeraria”. Cabe recordado que el pasado mes de marzo tuvo lugar la inauguración del aeropuerto de Vilanova d’Alcolea que, diez meses después sigue inoperativo y, lo que es peor, sin fecha prevista de apertura. En ese acto, el entonces presidente de la diputación e impulsor del proyecto, Carlos Fabra, bromeó con sus nietos ante los medios de comunicación preguntándoles si “les gustaba el aeropuerto del abuelo”. Por este motivo, diez meses después y tras la decisión de las empresas constructoras de llevar a los tribunales a la Generalitat para reclamar el dinero de las obras, Josep Gisbert, ha preguntado al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, “quién va a pagar el aeropuerto del abuelo”. De hecho, esta misma mañana, en la comisión de Infraestructuras, Gisbert ha pedido al vicepresidente, Francisco Martínez, explicaciones por lo sucedido, tras las declaraciones del propio presidente, Javier Moliner, en la que considera “totalmente acertado” que la Generalitat rescinda el contrato con la empresa que estaba encargada de la gestión del aeropuerto, apenas unos meses antes de su supuesta puesta en funcionamiento. Para Gisbert, “en cualquier empresa privada, una decisión de este calibre habría supuesto la destitución inmediata de todos los responsables del proyecto, habida cuenta de que el aeropuerto, diez meses después de la inauguración por todo lo alto, ni funciona, ni se ha pagado a las empresas que lo han construido, ni se sabe cuándo se pondrá en marcha y encima de acaba en los tribunales”.

Cabe recordar que ayer mismo, el portavoz socialista, Francesc Colomer, afirmó que los miles de profesionales que viven de forma directa e indirecta del sector turístico y con los que el PP se había comprometido a impulsar esta infraestructura “fundamental para el futuro de la provincia, se merecen ahora una explicación y una aclaración por parte de aquellos que están abocando al aeropuerto a un callejón sin salida”. Además, Gisbert ha recordado que durante varios años “el grupo socialista en Les Corts Valencianes presentó una propuesta para que fuera AENA la encargada de gestionar el aeropuerto, cuando estaban las obras en marcha y cuando se estaba gestando el proyecto. Sin embargo, el PP en bloque, incluido Alberto Fabra que era diputado autonómico, se opuso rotundamente y ahora, cuando ya es tarde, lo proponen de nuevo, lo que prueba el grado de improvisación con el que han llevado esta infraestructura”.

Se da la circunstancia de que hace apenas una semana, el PP en la diputación votó en contra de la moción del grupo socialista que pedía precisamente, entre otras cosas, un plan estratégico para impulsar el aeropuerto. Gisbert lamenta que “todos los responsables del PP que abarrotaron el aeropuerto el día de su inauguración, estén ahora escondidos y no expliquen a la opinión pública qué va a pasar con esta infraestructura y por eso, los socialistas están preparando una batería de iniciativas para presentar en las diferentes instituciones para que “los responsables de este despropósito expliquen a la opinión pública cómo piensan sacar adelante un aeropuerto que ellos mismos se han encargado de hundir antes de ponerlo en marcha”.

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