Ernest Blanch cree que con las delaciones del arrepentido Ricardo Costa “el PP ha entrado en pánico y corre serio riesgo de descomposición”

El secretario general del PSPV-PSOE en la provincia de Castellón, Ernest Blanch, sospecha que el Partido Popular de Castellón y del conjunto de la Comunidad Valenciana está entrando en un preocupante proceso descomposición “que puede tener funestas consecuencias”.

Es su reacción ante la noticia aparecida en el día de hoy, en la que se pone de manifiesto que el otrora secretario general del partido y mano derecha de Camps, Ricardo Costa, “no está dispuesto a comerse en solitario el ‘marrón’ de Gürtel”.

Blanch cree que Costa, que “está a punto de traspasar el umbral de la cárcel”, se ha convertido “en un serio peligro para el Partido Popular, porque de repente se ha recuperado de la amnesia de la que estuvo aquejado durante lustros, y no parece dispuesto a tener miramientos ni con nada, ni con nadie”.

“Ni con el mismísimo Carlos Fabra, al que ha acusado de haber entregado 90.000 euros en negro a Orange Market para pagar la organización de actos electorales del Partido Popular de la campaña de las municipales y autonómicas de 2007”. Concretamente, en el informe pericial al que hace referencia eldiario.es se habla de sendos actos celebrados en Castellón capital y Vall d’Uixó. Costa también delata al ya condenado por corrupción, Francisco Martínez, exalcalde de Vall d’Alba y exvicepresidente de la Diputación, que según dice, habría pagado 16.000 euros a la trama.

Blanch considera que se trata de “una revelación de especial gravedad porque los candidatos del Partido Popular en aquella convocatoria electoral en Castellón eran, entre otros, Alberto Fabra, Javier Moliner y Vicent Sales, y en Vall d’Uixó, Isabel Bonig”.

El líder de los socialistas recuerda que la semana pasada, “Ricardo Costa ya delató a Francisco Camps y al castellonense Víctor Campos, en su día, mano derecha de Carlos Fabra y del propio Camps”.

Llegados a este punto, Blanch se pregunta “cuál será la próxima sorpresa, ¿tiene Ricardo Costa guardadas más bombas, tienen la certeza los actuales dirigentes del PP en Castellón y en la Comunidad de que no saldrán salpicados si su excompañero sigue tirando de la manta, puede ser el pánico escénico a la viperina lengua del arrepentido Costa, el que explique que hasta hace poco el Partido Popular haya pagado su defensa?”