La Diputación pone en marcha el primer programa de intercambio provincial de personas mayores en el que participarán 10 municipios de la provincia
Los jubilados de Aín visitan el patrimonio histórico-artístico Atzeneta del Maestrat y degustan productos tradicionales del municipio
Medio centenar de jubilados y pensionistas de la asociación de Aín han visitado esta mañana Atzeneta del Maestrat, en el marco del Primer Programa de Intercambio de personas mayores, impulsado por el área de Acción Social de la Diputación de Castellón.
La iniciativa consiste en que jubilados y pensionistas de un municipio pasen un día de convivencia con los jubilados y pensionistas de otro municipio que pertenezca a otra demarcación comarcal de la provincia distinta a la suya.
En esta ocasión, los jubilados de Aín, acompañados por la vicepresidenta Esther Pallardó, los alcaldes de Aín y Atzeneta y los jubilados de uno y otro municipio, visitarán el Centro Social Polivalente, donde se les dirigirá unas palabras y donde degustarán los tradicionales cocas de tomate y de cebolla de Atzeneta. A continuación visitarán el altar mayor de la Iglesia de Sant Bertomeu donde visionarán un vídeo de la población; el castillo, la torre de la cárcel y el Calvario.
Tras la visita cultural compartirán mesa y mantel en una degustación de productos típicos, donde no faltará el turrón y los mazapanes. A las 16.30, la rondalla de Atzeneta El Soroll les ofrecerá una actuación musical que dará por finalizada la jornada de intercambio.
La iniciativa tiene como objetivo aumentar la oferta de servicios a través de programas intermunicipales de convivencia, de voluntariado, culturales y de acciones que garanticen la dinamización del colectivo de la tercera edad, el bienestar de nuestros mayores y la actividad en nuestros municipios, según ha explicado la vicepresidenta de Acción Social, Esther Pallardó.
La participación de las personas mayores en programas como éste “enfatiza su interés por aprender, por viajar, por desarrollar nuevas relaciones de carácter social fuera del entorno familiar, por vivir sensaciones nuevas, por intercambiar experiencias, por conocer el patrimonio histórico-artístico de otros municipios, por compartir impresiones y por canalizar, en definitiva, su espacio de ocio y tiempo libre”, afirma Pallardó.
