Pañella: "El decreto sobre la deuda hipotecaria es solo un parche, y puede resultar aún mucho peor"

El diputado de Compromís por Castelló, Josep Maria Pañella, ha asegurado que "todo lo que no sea la dación en pago, es decir, que cuando una persona no pueda pagar la deuda hipotecaria de un piso lo ceda al banco que le dejó el dinero y quede libre de toda deuda, será sólo un parche y no servirá para resolver el grave problema que se plantea a tantas personas y familias en el País Valenciano y en todo el estado".

Pañella ha recordado que "para Compromís, este tema no es un descubrimiento reciente, como parece serlo para el PP y para el PSOE. Desde hace muchos meses estamos llevando esta cuestión a las Corts Valencianes, exigiendo una solución al problema, ante la mirada, entre escéptica y perdonavidas, de populares y socialistas. Advertimos en su momento que el problema iría a más, que la bola se iría haciendo más y más grande, pero ni unos ni otros, ni en València ni en Madrid, han querido nunca tomárselo en serio, con declaraciones además que, a veces, rayaban en la inhumanidad"

El diputado de Compromís ha asegurado que "sólo ahora, cuando la tensión en la calle ha alcanzado unos niveles preocupantes para ellos, porque el dramatismo de la situación ha llevado a unos niveles de indignación a la ciudadanía, ahora, tarde y mal, quieren mirar de detener los casos más escandalosos, con un mero parche, sin ir a la raíz del problema, con un decreto que no sólo no resolverá nada, sino que liará aún más la ya lamentable situación. Desde Compromís insistimos en que nuestro trabajo es salvar personas, no bancos, y que todo lo que no sea la aprobación clara y con efectos retroactivos de la dación en pago y el poder recomenzar de cero, basándose en los informes en contra de la abogacía general europea, sin deudas lastradoras, será una actitud completamente equivocada, que no servirá para resolver el grave drama por el que atraviesan tantas personas y familias. Si el valor de las viviendas ha bajado tanto, tienen que ser las dos partes, las personas pero también los bancos, quienes deban afrontar las pérdidas, y no sólo las personas que habían suscrito una hipoteca por unas viviendas a unos precios inflados por esos mismos bancos"