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Cerdán lamenta que el Consell haya tardado dos años en rectificar su postura sobre la Línea 2

    El secretario general de los socialistas de la provincia de Alicante exige que Isabel Bonig asuma su responsabilidad política por haber privado a Alicante, a San Vicente del Raspeig y a sus ciudadanos de un transporte esencial durante 2 años. Cerdán recuerda que "en tiempos de crisis como ésta, al parecer la única que no sabía que no iba a encontrar ninguna empresa que pudiera gestionar la Línea 2 y hacerse cargo de una infraestructura como ésta era Isabel Bonig”. Es por esto que el dirigente socialista ha calificado como “inexplicable” que se haya mantenido una posición cerrada y contumaz durante todo este tiempo y no haya sido capaz de escuchar los numerosos llamamientos que ha hecho el PSPV, las organizaciones sindicales y los trabajadores del TRAM para la puesta en marcha de la Línea 2.

    Y es que para los socialistas, tras años de mociones, declaraciones institucionales, en algunos casos apoyadas directamente por su propio partido, pidiéndole algo que demandaba toda la ciudadanía, trabajadores, sindicatos y plataformas, que era poner en marcha un servicio esencial que une el Hospital, la Universidad y las ciudades de San Vicente de Raspeig y Alicante, se ha demostrado que el PSPV tenía razón y que era FGV quien debía poner en marcha esta línea, por seguridad y facilidad para la explotación, además de que se ha pagado íntegramente con dinero público y son los ciudadanos los que tienen derecho a recuperar ese dinero con la gestión directa de Ferrocarrils.

    Por otro lado, Cerdán manifestó que Bonig debería hacerse cargo de las cifras que ha generado su gestión de forma directa, 50.000 euros diarios -como ha cifrado el Foro de la Movilidad de la Comunitat Valenciana- y que se han dejado de percibir durante 2 años por su decisión de mantener cerrada esta infraestructura. “Es incomprensible que habiendo recibido un informe del Comité de Empresa de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana en el que se aseguraba que desde el primer momento de puesta en marcha de la línea 2 se iban a percibir beneficios, ella mantuviera su negativa a que éstos pusieran en funcionamiento la línea de forma directa e inmediata".

    Además desde el PSPV se exigió a la Consellera de Infraestructuras que retire el ERE que pesa sobre los trabajadores porque “ni son culpables de la pésima gestión ni al parecer sobraban como ha querido hacer ver la Consellera”.

    En este sentido Cerdán señaló que el ERE en Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana es un “fraude a la ciudadanía, un golpe a los servicios públicos cuya gestión tiene encomendada la Generalitat y una medida injusta y arbitraria que carga en los trabajadores su propia incapacidad de gestión, su falta de previsión y sobre todo el despilfarro y malgasto de dinero público que ha caracterizado la gestión del PP en esta Comunitat”.

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