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Los senderistas aumentan un 50% en la Punta del Cavall tras cerrarse el tráfico

  • La ruta recorre 1,5 kilómetros de litoral virgen en el Parque Natural de la Serra Gelada

El número de senderistas que transitan la Punta del Cavall ha pasado de 2.011 entre enero y octubre de 2007, a 3.900 en el mismo periodo del año 2008, lo que representa un incremento del 52,7%.

Este incremento coincide con el cierre de la ruta a la circulación de vehículos motorizados, decretada en marzo de 2007 por la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda. De hecho, según los datos de la Oficina Técnica del parque, a partir de marzo de 2007 no se constata la presencia de vehículos a motor por el camino de la Punta del Cavall.

La medida está avalada por los visitantes y usuarios, ya que, según una encuesta sobre cien personas realizadas por la Oficina Técnica del parque, el 95% opinaron que no volverían a abrir el paso al tránsito rodado y comentaron el beneficio que ha tenido esta iniciativa.

Según el mismo estudio, el cierre de la ruta para los vehículos a motor ha coincidido con un aumento de la circulación de bicicletas y la práctica de la pesca con caña.

La encuesta, que viene realizándose desde hace un año, apunta una mayoría de turistas (74%) frente a un 26% residentes en Benidorm; además, el 54% de los encuestados conocía la zona antes que se declarase parque natural, y, de este porcentaje, el 98% coincide en que el parque se encuentra ahora en mejores condiciones que antes de su declaración como parque natural.

Una ruta por el litoral virgen
La Punta del Cavall es una de las principales rutas para senderistas del Parque Natural de la Serra Gelada, junto a la que recorre la cresta de la sierra entre Alfàs del Pi y Benidorm, y la que transcurre entre Alfàs del Pi y el camino del Faro de l’Albir.

Gestionada de manera compartida por la Conselleria de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Benidorm, la ruta de la Punta del Cavall comprende 1,5 kilómetros de litoral virgen en el extremo sur de la Serra Gelada, entre el final del área urbana de Benidorm y la Punta del Cavall.

La punta alberga una torre medieval y un mirador, desde donde se obtienen las mejores vistas a dos de las zonas más valiosas del parque: los acantilados, de los más altos de Europa; y las dunas fósiles con sus endemismos. Es, además, el punto de más fácil acceso –incluso está adaptada a las personas discapacitadas- a estas panorámicas, ya que la alternativa es el transporte marítimo.

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