Medio Ambiente aplica las nuevas acciones post-incendio en el territorio quemado de la Vall d'Ebo
La consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, ha asegurado hoy en Les Corts Valencianes que las nuevas acciones post-incendio que la Dirección General de Prevención tiene planificadas para combatir los daños originados por incendios de gran calibre "se han llevado a cabo de manera rigurosa y con toda la atención que merecen las zonas forestales afectadas" en La Vall d'Ebo.
Cebrián se ha manifestado en este sentido en respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el Grupo Parlamentario Compromís y ha explicado las nuevas acciones de la Dirección General de Prevención de Incendios, consistentes en crear mesas de concertación y participación en áreas que han sufrido grandes incendios con el fin de definir y rediseñar los objetivos de restauración. Este mecanismo se complementa con la recuperación de la línea de trabajo con el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), para elaborar un protocolo de actuación post-incendio que defina los criterios a seguir para la regeneración de las zonas quemadas a medio y largo plazo, así como para controlar la erosión y luchar contra la desertificación.
La consellera de Agricultura y Medio Ambiente ha asegurado que "el pasado mes de octubre la Dirección General convocó a los sectores sociales más importantes del territorio afectado por este siniestro y se constituyó la Mesa de Concertación post-incendio forestal Vall d'Ebo 2015, como instrumento de participación para identificar los problemas más importantes y darles solución y estimular grupos de trabajo para poder intercambiar toda aquella información que permita consolidar las líneas de actuación a seguir en el territorio afectado".
Paralelamente a esta medida, y también en octubre, ocho brigadas de la Red Natura junto con personal técnico de la conselleria, llevaron a cabo actuaciones de extracción de pinos quemados sólo a los lados de las carreteras de los términos municipales de Pego, Vall d'Ebo, l'Atzúbia y la Vall de Gallinera, por seguridad y con el fin de evitar caídas de árboles sobre las vías de comunicación, ha subrayado la consellera.
Elena Cebrián también ha recalcado que el equipo de la Conselleria trituró los restos de menor tamaño para ser depositados en el suelo con el fin de protegerlo de la erosión y "marcaron tres parcelas de 25x25 metros cada una para iniciar un seguimiento de la evolución de la vegetación, además se plantaron en 105 puntos plantas bulbosas, de la especie narcissus perezlarae, y se colocaron dos bebederos de 80 litros de capacidad para recoger agua lluvia y así facilitar el suministro de agua a la fauna de las zonas afectadas por el incendio".
