Un estudio analiza el consumo de la prostitución en la Marina Alta
La Xarxa Comarcal d’Igualtat de la Marina Alta presentaron este miércoles en el salón de plenos del EATIM de Jesús Pobre los resultados del estudio sobre el consumo de prostitución en la comarca, en un acto abierto a toda la ciudadanía. Complementariamente se realizó en Benissa una presentación institucional de las conclusiones y recomendaciones a las administraciones locales de la comarca. Este estudio estará disponible en internet para todos los interesados.
La Marina alta es una de las comarcas con más concentración de espacios de prostitución de la Comunitat Valenciana. Este estudio se acerca a la realidad de los hombres que consumen servicios sexuales, poniendo el acento en la relación de este fenómeno con los factores sociales de las masculinidades y cómo el consumo de la prostitución se aprende, comparte, naturaliza y legitima a través de practicas colectivas asociadas a los ámbitos de la vida como el trabajo, la fiesta y el deporte.
Además, esta investigación, desarrollada por la cooperativa La Dula, incluye un mapeo de los lugares de prostitución existentes en la comarca (carretera, clubs, pisos e internet) constatando una transición desde un modelo organizado en torno a los clubs de carretera hacia nuevas formas de prostitución en pisos y chalés privados con un papel central de las nuevas tecnologías.
Por último, se proponen una serie de recomendaciones para orientar políticas y actuaciones públicas con el objetivo de contribuir a la eliminación de las múltiples desigualdades que vertebran el mundo de la prostitución.
Esta investigación ha sido impulsada por la Xarxa Comarcal d’Igualtat Marina Alta, constituida en 2020 con el objetivo de colaborar, compartir recursos y elaborar políticas públicas integrales de igualdad y prevención de la violencia de género.
Conscientes de que la prostitución es un fenómeno amplio que se ha de abordar desde diversos ámbitos y formas, la Xarxa tiene la convicción de que las mujeres en situación de prostitución han de ser el sujeto prioritario de las políticas públicas, pero también debe abordarse desde los clientes, entendidos como actores principales.
