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Cambiemos Orihuela aclara algunos aspectos sobre las invitaciones de la Procesión del Santo Entierro

    El Ayuntamiento ha enviado las tradicionales invitaciones a la procesión del Santo Entierro, y al resto de actos que rodean a la figura del Caballero Cubierto en la Semana Santa de nuestra ciudad. En la tarjeta se indica que la invitación parte del Alcalde de Orihuela y de la Comisión de Festividades del Ayuntamiento, personificada en las portavoces de los cinco grupos municipales en dicha comisión, entre las que me incluyo. Mi nombre, por tanto, aparece de forma explícita en las invitaciones municipales a una serie de actos religiosos financiados por la administración local que tendrán lugar a lo largo de las fiestas.

    Desde Cambiemos Orihuela siempre hemos manifestado muy nítidamente nuestra posición con respecto a la procesión del Santo Entierro. Nos abstuvimos en el Pleno extraordinario convocado para nombrar al Caballero Cubierto, con unos argumentos que nada tenían que ver con la idoneidad de la persona elegida para el cargo, sino con nuestra voluntad de defender el laicismo de las instituciones. En un intercambio de misivas posterior, el propio Caballero Cubierto manifestó su respeto a nuestra decisión; nosotros igualmente le comunicamos nuestro profundo respeto tanto a su persona como a la figura simbólica que representa.

    Apreciamos mucho las tradiciones de nuestra ciudad, y somos perfectamente conscientes de que muchas de ellas están vinculadas a la religión cristiana, como es natural dada nuestra historia. En Cambiemos vivimos nuestras fiestas con mucha ilusión, algunos motivados por la fe, pero todos desde el amor a la cultura, el respeto a nuestra historia y al arraigo popular. Pero consideramos que la laicidad de la Administración Pública es fundamental para salvaguardar la libertad de credo -que pertenece a la esfera personal- y garantizar la pluralidad, también religiosa o no religiosa, en la que debe basarse cualquier sociedad democrática. Además, nuestra posición como representantes públicos no puede justificar que ocupemos espacios de privilegio en una fiesta que pertenece al pueblo, y que por tanto debería funcionar de forma independiente a la Administración Local. El Caballero Cubierto debe ser elegido por la comunidad religiosa que hace posible la fiesta, no por el Pleno, y la celebración de misas y procesiones no debe promoverse desde el Ayuntamiento de Orihuela, sino suceder libremente al margen de él.

    Además, la Comisión de Festividades no se ha reunido para tomar ninguna decisión con respecto a las invitaciones enviadas. No se me ha comunicado en ningún momento que yo, personalmente, iba a figurar como representante público convocando a la ciudadanía a asistir a un acto religioso, algo a lo que me habría negado, evidentemente, por colisionar con los principios democráticos que defiendo desde mi grupo. Lamento tener que manifestar públicamente mi rechazo a esta forma de proceder del equipo de gobierno. Espero que, en próximas ocasiones, se respete nuestra voluntad de mantener la distancia entre lo civil y lo religioso, al menos desde nuestro grupo municipal, tal y como hemos expresado claramente en repetidas ocasiones.

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