La inversión del Consell en el Echegaray en 2011 equivale por ciudadanos al precio de un cortado
EL portavoz del PSOE asegura que la consellera de Cultura no acudió a la inauguración del teatro de Ontinyent “por vergüenza” y recrimina a Lina Insa que no reinvidicara la deuda de la conselleria con Ontinyent
Jorge Rodríguez contrapone los 2,3 millones del euros del Gobierno con los incumplimientos de la Cultura
Rodríguez entiende que a la consellera de Cultura “le dé vergüenza” porque, por ahora, para el Teatro Echegaray la Generalitat dice que ha pagado 100.000 euros, una cantidad que “dudo que se haya ingresado en el ayuntamiento”. El portavoz del PSOE ha señalado que “es lógico que Trini Miró prefiriera no estar” porque sabe que el teatro ha estado 7 meses terminado y cerrado “por su culpa” y que ahora volverá a cerrarse tres semanas más “por la racanería de la conselleria, que se resistió a poner el dinero, y a la imprevisión de la señora Lina Insa “.
Frente a esta “desoladora realidad”, Jorge Rodríguez ha contrapuesto los 2,3 millones de euros invertidos por el Gobierno de España en las obras, unas obras que debían haberse realizado con el dinero de la Conselleria de Cultura, como recordó Rodríguez: “si nos tuviéramos que haber esperado a la Generalitat, aún estaría el teatro cerrado”. Para hacerse una idea de lo que Insa pinta en el PP, ha destacado Rodríguez, “sólo la inversión del Estado en el Echegaray es superior a todas las inversiones directas que el Consell ha presupuestado en Ontinyent para cada año”. En 2008 se presupuestaron 1,2 millones, 1,05 en 2009, algo más de 2 millones en 2010 y apenas 1,6 millones para 2011. Y la pregunta es “¿para qué vino un representante del Consell? Pues yo pensaba que Lina Insa aprovecharía su presencia para reivindicar que el Consell pague los 800.000 euros. Pero no, y eso que si miramos el convenio se decía que en 2011 se destinarían 70.000 euros, pero si vamos a las previsiones de la conselleria sólo hay 45.500 euros, un 35% menos”. Según Jorge Rodríguez, “a este paso pagaremos dos veces las butacas y el tinglado escénico de tantos intereses de demora que nos cobrarán”.