Onda vigila los vertederos incontrolados a través de las contraprestaciones sociales

El Ayuntamiento de Onda ha puesto en marcha ocho brigadas que controlan y vigilan el término municipal para alertar de la aparición de posibles vertederos incontrolados en varias zonas del término municipal. Se trata de 16 personas integradas dentro del programa de contraprestaciones sociales del Ayuntamiento de Onda y vigilan áreas sensibles como el Riu Sec, el Salvador o el Sitjar. Su cometido es controlar estas partes de la localidad y, en el caso de detectar un vertedero ilegal, dar parte a la concejalía de Servicios Municipales y los técnicos acuden a la zona para limpiar estas áreas.

El teniente de alcalde de Servicios Municipales, Vicente Ramón, explica que “se han dividido las brigadas por áreas sensibles para que todo el término municipal esté en las mejores condiciones posibles”, cuenta. Además, una de las máximas que se ha dado ha sido “la seguridad”. Es decir, “que no arriesguen durante su labor para evitar problemas, que se limiten a inspeccionar sus partes concretas pero respetando siempre la seguridad de ellos mismos”, explica.

Las 16 personas que participan en esta iniciativa están incluidas dentro del programa de contraprestaciones sociales que dignifica el concepto de ayuda social de forma pionera en la localidad de Onda.

Cohesión social de los ondenses

Tal y como recuerda la teniente de alcalde de Atención Social, se trata de que “las ayudas han dejado de ser pasivas y pasan a dignificarse al realizar a cambio de ellas una contraprestación social que ayuda a cohesionar aún más a todos los ondenses”.

El Ayuntamiento de Onda ofrece un gran abanico de posibilidades y programas vinculados a las posibles acciones enmarcadas en la contraprestación social a cambio de una ayuda. El Casal Jove, l’Escola d’Estiu, el SAD, la teleasistencia o la Agencia AMICS son sólo algunos ejemplos de ello.

También está la posibilidad de colaborar con actividades municipales o de entidades sin ánimo de lucro. “El equipo de gobierno pretende integrar también a aquellas personas que están en el umbral de la exclusión social y que, a través del voluntariado pueden encontrar una vía más para su integración”, cuenta Inma Alós.