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Casi 200 personas en el Museo del Azulejo el sábado por la noche para celebrar su día

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    Casi 200 personas visitaron el sábado por la noche el Museo del Azulejo Manolo Safont de Onda para celebrar el Día Internacional de los Museos con una queimada de orujo gallego, después de una fiesta nocturna protagonizada por el grupo local Arteatre.

    El acto se celebraba en todos los centros del mundo con el lema Museos para la armonía social, con el objetivo hacerlos sentir como algo vivo e interactuar entre la institución y la sociedad que los sustenta. Así se desprendía del manifiesto leido por el alcalde y presidente de la Fundació Museu del Taulell, Enrique Navarro.

    La fiesta se inició a las 21.30 horas con un vino de honor de bienvenida a los participantes. Tras la lectura del manifiesto, llegaron al vestíbulo del edificio dos diablos zancudos y otros dos de estatura normal para iniciar la performance I si no tinguèrem museu? Los actores se dedicaban al botellón y a romper los azulejos.

    Pero llegó una actriz sobre zancos, que representaba al cielo blanco, y dirigió a los asistentes en una visita guiada por la sala de exposiciones permanente, donde se muestran las colecciones, desde la época romana hasta los diseños más vanguardistas, pasando por el barroco y el modernismo, en el que el Museo del Azulejo “Manolo Safont” es una referencia.

    En la sala de exposiciones temporales, los diablos, una vez embelesados por las piezas que habían visto en el Museo, persuadidos por el cielo balnco, se dedicaron a colgar azulejos en los paneles e invitaron al público a que hiciera lo mismo.

    De nuevo en el vestíbulo del edificio, el brujo Pepo recitó el conjuro de la queimada en castellano y todos los asistentes pudieron tomar un vasito, como signo de mezcla de culturas en armonía.

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