El Ayuntamiento ahorrará hasta un 85% en alumbrado público con la sustitución de 245 farolas

El Ayuntamiento de Nules ahorrará hasta un 85% en el gasto de alumbrado público tras la aplicación del proyecto de renovación de todas las farolas de las avenidas Castellón, Valencia y Jaume I, la carretera de la Vilavella y la travesía entre la plaza del Pilar y el Centro de Salud. Un total de 245 luminarias que serán sustituidas por otras nuevas de tecnología led, en los próximos días.

El consistorio comenzó a trabajar sobre este proyecto hace varios meses, cuando se planteó la sustitución de todas las luminarias de la carretera de la Vilavella y la travesía entre la plaza del Pilar y el Centro de Salud. Para ello se presentó la propuesta a las líneas de subvención publicadas tanto por la Diputación Provincial de Castellón, como por el Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial (IVACE). Ambas instituciones aprobaron la concesión de una subvención del 40%, cada una, sobre el total del proyecto, que asciende a los 68.751 € más IVA.

Tras conocer la concesión de la subvención, el consistorio tramitó la licitación del proyecto, en la que se solicitaron mejoras a las empresas que aspiraran a ejecutar esta actuación. Como explica el concejal de Medio Ambiente, José Manuel Casaus, la negociación “no podía haber sido más beneficiosa para Nules”, porque la mejora presentada por la adjudicataria, Elecnor, ha sido incluir en el proyecto (redactado por la empresa local Engitec) la sustitución de 112 luminarias que vienen a sumarse a las 133 que incluía el proyecto inicial, lo que permite completar un proyecto que mejorará la iluminación de varias de las vías de comunicación más importantes de la ciudad pero, sobretodo “supondrá una evidente mejora energética, por lo que supone de abaratamiento del coste económico, así como de reducción de emisiones, ya que se calcula que las nuevas farolas supondrán una disminución en las emisiones de CO2 del 70%”.

Este importante proyecto ha sido posible gracias a las negociaciones y al trabajo que viene realizándose en el Ayuntamiento desde hace muchos meses, cuando se planteó como objetivo prioritario reducir el coste de la factura eléctrica. Para ello, como primer paso, se optó por el apagado alterno de líneas de farolas en toda la localidad, lo que supuso un ahorro evidente “aunque en todo momento nos planteamos esta decisión como provisional, ya que el objetivo era buscar el sistema más eficiente, con el menor consumo posible”.

El siguiente paso supuso la sustitución de las farolas convencionales del casco antiguo, La Vila, por otras de led y la instalación de reductores de flujo, actuación subvencionada por el AVEN. Esta decisión motivó el interés de empresas especializadas en alumbrado pública, como se constató en la jornada sobre eficiencia energética y alumbrado de edificios públicos organizada en el municipio por la empresa Phillips, que ha apostado por la localidad como ciudad piloto a la hora de instalar sus nuevos equipamientos en tecnología led.

Las nuevas 245 farolas utilizan luminarias led de 90w, cuando las anteriores tenían una potencia de 270w. La luz que producen es fría lo que, a diferencia de las farolas convencionales, aumenta e intensifica la visibilidad y los colores. Pero lo más importante, según José Manuel Casaus, es que el consumo de una farola convencional, se corresponde con el de tres de las nuevas, de ahí que se estime “que el ahorro final en consumo de energía oscilará entre el 80 y el 85%”.

Casaus señala que este es un paso más de un proyecto global sobre el que está trabajando el consistorio y que tiene como meta la renovación de todo el alumbrado público del municipio, “porque entendemos que este tipo de medidas son las que los vecinos esperan de su Ayuntamiento, mantener o mejorar los servicios que se prestan, reduciendo su coste”.