F. Castelló: “La competencia favorece el crecimiento económico, la generación de empleo y la competitividad de las empresas”
El fundamento de la existencia de las autoridades de la competencia es la protección y la defensa de los intereses de los consumidores
“Incentivar, favorecer, fomentar y defender la competencia es un buen instrumento para adelantar la salida de la crisis”
“En momentos de recesión económica como el actual es necesario incrementar la vigilancia para impedir medidas anticompetitivas”
El presidente del Tribunal de Defensa de la Competencia, Fernando Castelló, ha afirmado que la competencia “favorece el crecimiento económico, la generación de empleo y la competitividad de las empresas.”
Además, Fernando Castelló ha recalcado que “las empresas, los agentes económicos, y las instituciones son los destinatarios de las actuaciones contempladas en las políticas de competencia, pero los principales beneficiarios son los consumidores.”
En esta línea, el presidente del TDC ha destacado que la competencia “intenta conseguir que los consumidores puedan tener a su disposición los mejores productos y servicios al mejor precio posible.”
Durante su intervención, Fernando Castelló ha señalado que incentivar, favorecer, fomentar y defender la competencia “es un buen instrumento para adelantar la salida de la crisis, ya que los beneficios de la competencia se trasladan a la economía, con más innovación, mayor creación de empleo, mejores precios, y mayor renta disponible para consumidores y usuarios.”
Asimismo, Castelló ha subrayado que la mayor intervención del Estado en momentos de crisis como el actual, la necesidad de adoptar medidas de choque o de rescate de determinados sectores económicos “no debe ir acompañada de la relajación o la falta de aplicación de las normas de competencia.”
“Todo lo contrario, en momentos de crisis, debemos incrementar la vigilancia para impedir la adopción de medidas anticompetitivas evitables y garantizar que se tomen las medidas estructurales necesarias para que la crisis no retrase la apertura de mercados ni impida mejoras en el nivel de competitividad a largo plazo.”
“En este sentido –ha continuado Castelló- las autoridades de competencia tenemos una responsabilidad añadida en periodos de crisis en la vigilancia sobre el correcto funcionamiento de los mercados y sobre la adopción de medidas que puedan restringir la competencia o que puedan ser ineficaces a medio o largo plazo.”
Así, y según apunta el presidente del TDC “es importante mantener la vigencia y el valor de las normas de competencia en época de crisis, y es necesario promover las reformas estructurales que impulsen un nuevo modelo de crecimiento.”
Por último, Fernando Castelló ha reiterado que las autoridades de competencia “debemos adaptarnos a las coyunturas y a los cambio que se producen poniendo especial énfasis en aportar ideas y recomendaciones para que el tratamiento de la crisis sea el más eficaz.”
