Font de Mora: “Estamos muy satisfechos con la mejora del clima escolar que ha propiciado el Decreto de Derechos y Deberes”

En este sentido, Font de Mora ha indicado que “el Decreto tiene como objetivos principales, entre otros, fomentar una educación de calidad, colaborar con todos los sectores de la comunidad educativa, promocionar la responsabilidad y el esfuerzo personal, respetar la autonomía de los centros, reconocer, valorar y reforzar la autoridad del profesorado y establecer, delimitar y garantizar el ejercicio de los derechos y el cumplimiento de los deberes de toda la comunidad educativa. También regula las normas de convivencia y los procedimientos para resolver conflictos que alteran la convivencia escolar”.

Estas declaraciones las ha realizado el conseller de Educación durante la entrega de los Premios Protagonistas de la Educación 2009, que ha realizado el periódico Magisterio. Con este galardón, el periódico, ha querido destacar la actuación, “pionera”, de la conselleria de Educación en la mejora del clima escolar y el reconocimiento legal de la autoridad del docente gracias a la puesta en marcha, en el paso año, del Decreto sobre la convivencia en los centros docentes de la Comunitat Valenciana y sobre los derechos y deberes.

Decreto de Derechos y Deberes
Asimismo, Font de Mora ha explicado que “este decreto busca conseguir una buena convivencia escolar que permita el desarrollo integral del alumnado, facilite el trabajo docente con total normalidad para que el sistema educativo alcance los fines y objetivos previstos”.

“Del mismo modo, - ha continuado el conseller- se pretende la regulación de los derechos y deberes del alumnado, de los padres, tutores, profesorado y del personal de la administración y servicios en el ámbito de la convivencia escolar, así como la regulación de las normas de convivencia y de los procedimientos para la resolución de los conflictos que alteren la convivencia escolar”.

Entre sus principales aportaciones destacan: la puesta en marcha de las unidades específicas y las aulas de convivencia; la aprobación, por cada centro, de planes de Convivencia y reglamento de régimen interior; procedimientos extraordinarios de evaluación para quienes superen un número máximo de falta de asistencia a clase; la regulación de los usos y prohibiciones en la utilización de las nuevas tecnologías (teléfonos móviles, aparatos de sonido y otros aparatos electrónicos) en los centros y la publicidad manifiesta, incluyendo la realizada a través de las tecnologías de la información y la comunicación como un incumplimiento de la norma de convivencia.

También el decreto prevé la sanción ante aquellas acciones que se registren fuera del recinto escolar; medidas educativas correctoras que se pueden aplicar sin expediente disciplinario y de ejecución inmediata y las podrán aplicar los profesores de aula o el jefe de estudios, por delegación del director y se tipifican hasta 16 tipos de conductas gravemente perjudiciales para la convivencia del centro por parte del alumno. En estos casos se aplicarán medidas disciplinarias como: la suspensión del derecho de asistencia al centro hasta un máximo de 30 días lectivos e incluso el cambio de centro educativo y la tramitación de los expedientes disciplinarios que se fija en un plazo máximo de resolución de un mes.

Además de derechos, el Decreto contempla deberes tanto de los padres, alumnos como profesores y, por primera vez, del personal de administración y servicios. Entre ellos destaca que el alumno tiene el deber de estudio y asistencia a clase, que requiere del esfuerzo, la disciplina y la responsabilidad; el deber de respeto a los demás y el deber de respeto a las normas de convivencia.

Los padres deben estar involucrados en la educación de sus hijos, también tendrán el deber de escolarización, el de colaborar con el centro educativo y el de enseñar a sus hijos a desarrollar una actitud responsable en el uso de las tecnologías de la información y comunicación, así como vigilar el tipo de información a la que sus hijos acceden a través de Internet y medios de comunicación. Y los profesores deben respetar el proyecto educativo del centro y cumplir con las obligaciones establecidas por la normativa sobre convivencia escolar.

Asimismo, el Decreto regula la consideración de los docentes como autoridad pública en el desempeño de su función y la consiguiente defensa jurídica y protección de la administración en los procedimientos que se sigan en el orden jurisdiccional.