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El Consell defiende un nuevo modelo de infraestructuras e inversiones

El Consell defiende un nuevo modelo de infraestructuras e inversiones

    El secretario autonómico de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, Josep Vicent Boira, ha expresado la necesidad de implementar un nuevo modelo de infraestructuras y de inversiones "que responda a las necesidades de la sociedad en el siglo XXI porque el actual modelo radial no responde a la realidad económica existente".

    Boira, que ha pronunciado la conferencia 'El Corredor Mediterráneo dentro de un nuevo modelo de infraestructuras de España' en la Cámara de Comercio de Girona, organizada por el Círculo de Infraestructuras, ha explicado que actualmente, "en el mundo globalizado que vivimos, las conexiones van mucho más allá de la situación física de las ciudades y de las fronteras políticas", por lo que "toma especial relevancia las conexiones exteriores que nos unen a la red global".

    Para Boira, estos puntos de enlace están muy marcados en el caso español, por una parte los pasos fronterizos de La Junquera e Irun, y por otro, los puertos y los aeropuertos. "Así, el modelo radial -ha dicho- poco tiene que ver con estas conexiones, mientras que el Corredor Mediterráneo conecta desde el paso fronterizo de La Junquera los cuatro principales puertos de España y tres de los cinco principales aeropuertos".

    En opinión del secretario autonómico, la realidad es que las conexiones mediterráneas carecen de un gran eje ferroviario que los conecte porque la infraestructura "no ha sido desarrollada correctamente en los últimos 20 años, provocando que ahora el servicio tanto para pasajeros como para mercancías sea impropio del siglo XXI".

    Falta de voluntad política

    Para Boira, la razones del estancamiento del Corredor Mediterráneo han sido de índole política, no económica, ya que el Gobierno de España ha invertido en el periodo 2007-2014 un total de 56.000 millones de euros en todo el Estado. "Pero la distribución ha sido desigual, ya que la zona norte y noroeste de España han disfrutado de una inversión per cápita 4 veces superior a la de la zona mediterránea, alcanzando los 1.194 euros de inversión por persona frente a los 270 euros por persona en la zona mediterránea". De igual manera, ha explicado que la necesidad del corredor tampoco se ha puesto en entredicho por parte de los técnicos, ya que, desde principios del siglo XX, "expertos diversos como Le Corbusier, Ignasi Villalonga o el Banco Mundial han remarcado la necesidad de ejecutarlo".

    De esta manera, según ha manifestado el secretario autonómico, "falla la tercera pata, la política". En este contexto ha mencionado cómo el Gobierno central, "en palabras del ministro Catalá, no ve el Corredor como lo que es" al restarle importancia, o al dar prioridad a otros ejes como ha hecho el ministro De la Serna con el AVE a Galicia". "Ahí es donde se presenta el verdadero problema que provoca que algunos tramos del Corredor Mediterráneo lleven 13 años en obras y que otros estén prácticamente acabados pero no se pongan en servicio". Boira ha añadido que, a los ojos de Europa, "estamos perdiendo oportunidades", claves en nuestro sistema económico exportador. Además, ha apuntado que el propio coordinador europeo del Corredor, el holandés Brinckhost, ha expresado en su informe que "no cree que el ancho europeo esté instalado en España en los plazos comprometidos por el Gobierno".

    El Corredor aportará mayor competitividad

    En este sentido, el secretario autonómico ha argumentado que actualmente están surgiendo nuevas oportunidades para el Corredor lo que repercutirá en la capacidad económica del Estado. Así la mejora en la logística del transporte en la industria del automóvil, clave en España, podría permitir una mayor competitividad, "evitando la fuga de factorías a otros países". Igualmente sucede con el sector agroalimentario español, que sigue siendo "la despensa" de Europa a lo largo de todo el invierno.

    Finalmente, Boira ha manifestado que si el ministerio no apoya el desarrollo del ferrocarril de mercancías, sobre todo en el Corredor Mediterráneo y en su conexión con el Cantábrico, provocará un déficit en la economía española "con la consecuente pérdida de potenciales puestos de trabajo o de poner en riesgo los existentes".

    Además, ha apuntado que informes europeos observan cómo el único tramo de la Europa Occidental que sigue diseñado con una única plataforma es el Valencia-Tarragona, planes ministeriales que "provocarán un gran cuello de botella en un corredor de 3.000 kilómetros que cruza Europa".

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