Compromís celebra la anulación del permiso para “la contaminante planta de residuos animales que Bonig autorizó”
El portavoz adjunto de Compromís, Juan Ponce, ha mostrado la satisfacción de su formación tras hacerse público que el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha anulado la Declaración de Interés Comunitario (DIC) de la planta de tratamiento de residuos de origen animal de la Vall d'Albaida, recurrida por el Ayuntamiento de la Pobla del Duc.
Ponce ha recordado que la actual Presidenta del PP, Isabel Bonig, autorizó en el año 2013, cuando estaba al frente de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, el DIC que permitía la construcción de una planta de residuos animales en el término municipal de la Pobla del Duc, y lo hizo a pesar de contar con el rechazo de los ayuntamientos de todos los municipios afectados, Otos, Bèlgida, Quatretonda, Ràfol de Salem, Castelló de Rugat, Carrícola, Beniatjar y la propia Pobla del Duc que comparten el paraje de la Ombria del Benicadell, que se hubiera visto gravemente amenazado. El pleno de la Mancomunidad de Municipios de la Vall d'Albaida se sumó asimismo al rechazo a la autorización de esta planta, contra la que también se posicionó una plataforma ciudadana creada al efecto que realizó múltiples movilizaciones.
Según Ponce "la justicia deja en evidencia la actuación irregular de la conselleria que dirigía Isabel Bonig por dar los permisos a una instalación de residuos de origen animal no aptos al consumo humano, incluidos los tipificados como peligrosos de categoría 1, que comportaba numerosos perjuicios objetivos a la ciudadanía y al medio ambiente".
"Bonig hizo caso omiso a la oposición vecinal al proyecto a pesar de las advertencias de los posibles contagios y afecciones en la salud de personas y animales, la contaminación de los suelos, ríos y acuíferos, la contaminación del aire con la quema de animales, los graves impactos sobre las explotaciones agrícolas de la zona, el alto riesgo de contaminación para la ganadería lindante, los insoportables olores susceptibles de ser transportadas por el viento hasta las poblaciones vecinas y la pérdida de valor turístico que conllevaban la construcción de la planta".
"Desde Compromís queremos felicitar a la sociedad civil de la Vall d'Albaida por su lucha por preservar su medio natural que finalmente ha conseguido que se pare la construcción de esta devastadora instalación", ha concluido Ponce.
