La Generalitat se compromete a rendir cuentas de las observaciones de la Sindicatura de Comptes anualmente
El President de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado, durante el nombramiento del Síndic Major de Comptes, Vicent Cucarella, que el Consell se compromete a rendir cuentas del grado de cumplimiento de las observaciones realizadas por la Sindicatura de Comptes anualmente.
El jefe del Consell ha destacado que es necesario el “esfuerzo conjunto” de la Generalitat y la Sindicatura de Comptes para conseguir ser “una administración modélica y eficiente, que absorbe lo más avanzado en materia de gestión pública, innovación e interacción con los ciudadanos”. Por ello, ha señalado que el Consell y la Sindicatura de Comptes compartirán “desde la más absoluta independencia” un triple objetivo: la transparencia, la financiación y la eficiencia.
Asimismo, Ximo Puig ha agradecido a la Sindicatura de Comptes el trabajo reflejado en sus informes que van a hacer posible “una mayor eficiencia en la gestión” y que, a su vez, “realizan la función fiscalizadora del uso de los recursos públicos para prevenir la corrupción” en la administración pública. En este sentido, Puig además ha recalcado que el trabajo de la Sindicatura es fundamental para fomentar la transparencia, una cualidad “necesaria para la agenda de la modernización de la acción política institucional”.
Por otro lado, el President ha remarcado la sensibilidad del nuevo Síndic Major, Vicent Cucarella, por la reivindicación un sistema de financiación justo para la Comunitat Valenciana, y ha señalado que la Sindicatura de Comptes contribuirá “al trabajo y el esfuerzo común que tanto necesita la Comunitat Valenciana”.
“La reivindicación institucional de una financiación justa va más allá de cualquier ámbito partidario; la Sindicatura lo ha dicho en muchos informes, alto y claro, y lo ha hecho con contundencia”, ha asegurado Puig. Por esta razón, el jefe del Consell ha asegurado que reclamar un sistema de financiación justo no se trata de “una queja de oficio”, sino de “una queja de prejuicio real a la que muchas veces se intenta neutralizar afirmando que seguimos siendo el 'Levante Feliz'”.
