Agricultura desarrolla un proyecto de cultivo de aguacates sin productos fitosanitarios
Tendrá lugar en varias parcelas de la comarca de la Marina Baixa con la variedad Hass
El consumo de esta fruta exótica se ha incrementado en los últimos años en los hogares valencianos
La Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) desarrolla un proyecto de cultivo de aguacates sin productos fitosanitarios.
Esta iniciativa se lleva a cabo en el marco del Proyecto Cero de investigación y experimentación que promueve la Conselleria con el objetivo de reducir el uso de productos fitosanitarios en los cultivos agrícolas de la Comunitat Valenciana garantizando, al mismo tiempo, el mantenimiento de los resultados productivos y los niveles de calidad del producto final.
Con esta estrategia, dentro del Plan Especial de Apoyo a los Sectores Productivos, los agricultores de la Comunitat disponen de alternativas que garanticen la competitividad de sus producciones ya que permitirá al sector adaptarse a las nuevas condiciones del mercado de forma gradual.
En concreto, para el estudio se ha seleccionado la variedad Hass, que es la más importante, y que se recolecta desde mitad de diciembre hasta el mes de abril. Para la realización del experimento en campo se han elegido varias parcelas ubicadas en la comarca de la Marina Baixa.
El cultivo del aguacate
El cultivo de aguacates se está introduciendo en la Comunitat Valenciana como una alternativa a algunos de los cultivos tradicionales.
En la actualidad se producen alrededor de 500 toneladas, en una superficie de unas 125 hectáreas, situadas principalmente en la provincia de Alicante, aunque también se está introduciendo en las zonas más cálidas de la provincia de Valencia.
Entre las ventajas de cultivar aguacates destacan la prolongada permanencia del fruto en árbol, lo que permite planificar su recolección en función de los precios, la escasa necesidad de realizar tratamientos fitosanitarios, la rápida entrada en producción de la plantación, la proximidad de los mercados europeos, que permiten ofrecer un producto de máxima calidad, y los buenos precios percibidos por el agricultor en los últimos años.
Asimismo, su consumo se ha incrementado en los últimos años en los hogares valencianos. De 1.257.000 kilos en 2006, se pasó a 1.475.000 kilos en 2007. En el año 2008, se consumieron del orden de 1.766.000 kilos, según los datos del Panel de Consumo Alimentario.
