La falta de sensibilidad y la rigidez secuelas más comunes en los pies de las personas que han padecido un ictus

Con motivo de la celebración mañana del Día Mundial del Ictus, desde el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) se ha señalado que hay que prestar especial atención a los pies de las personas que lo han padecido porque los músculos del área dañada suelen verse afectados y eso deriva en una alteración de la marcha al caminar.
Las secuelas más comunes en los pies después de un ictus son la espasticidad (contracción permanente de los músculos) y las neuropatías (pérdida de sensibilidad en la zona afectada). La primera puede provocar en la extremidad del lado que se ha visto afectado rigidez, dolor, contracturas y dificultar algunos movimientos al caminar y la segunda se manifiesta como un hormigueo en el pie.

Esto requiere que los pies de estas personas sean revisados periódicamente porque al tener una falta de sensibilidad podrían producirse heridas o quemaduras en el pie sin que el afectado se diera cuenta, que derivarían en problemas mayores para la salud del paciente.

Es importante la realización por parte del podólogo de un estudio biomecánico de la pisada para detectar si se ha producido alguna descompensación en la marcha habitual de la persona y así, dependiendo de cada caso, suele ser recomendable la incorporación de un tratamiento ortopodológico a través de un calzado especial, férulas o plantillas que ayude a restablecer en la medida de lo posible la funcionalidad de la extremidad afectada.

Junto a esto, como los pacientes que han sufrido un ictus son más propensos a tener caídas, por la afección de los músculos de un lado del cuerpo y los trastornos visuales que suele conllevar la enfermedad, se aconseja que utilicen un calzado antideslizante, que realicen ejercicios fortalezcan su musculatura y entrenen el equilibrio así como identificar y modificar aquellos aspectos del hogar que puedan suponer un mayor riesgo ante posibles tropiezos como pueden ser alfombras o sillas de plástico, colocar asideros en la bañera o ducha, etc.