Bonig asegura que lo partidos de la oposición no ven la amenaza catalanista porque forman parte de ella
Dice que sólo el PPCV es capaz de defender los intereses de los valencianos y de reclamar la financiación justa que necesita nuestro territorio
Destaca que los lideres minoritarios de la oposición nunca han defendido las señas de identidad de los valencianos
La Coordinadora General del PPCV, Isabel Bonig ha asegurado hoy que “los partidos de la oposición, como el PSPV, EU y Compromís no pueden ver ninguna amenaza catalanista ya que ellos mismos son esa amenaza y lo han sido siempre, sólo que ahora con más virulencia envalentonados por el proceso soberanista de esa Cataluña a la que siempre han querido pertenecer”.
La dirigente popular ha recordado "como el líder en minoría del PSPV, Ximo Puig, incluyó al Ayuntamiento de Morella en la Xarxa Ramón Llull por la unidad de la lengua catalana y el señor Morera, formó parte del Parlamento Europeo entre las filas de Convergencia i Unió”.
Bonig ha indicado que el PPCV es el único partido capaz de resolver los problemas que de verdad interesan a los valencianos, como lo ha estado demostrando el Consell de Alberto Fabra en las políticas de austeridad y generación de empleo que ya empiezan a dar los primeros resultados positivos.
“Desde el PPCV-ha asegurado Bonig- tenemos claro que es esencial que la Comunitat Valenciana disponga de la financiación justa que necesita para garantizar la sociedad del bienestar y seguir poniendo en marcha políticas de educación y sanidad para los valencianos”.
La Coordinadora General del PPCV asegura que el Consell no juega al despiste como si lo hacen los partidos de la oposición. “Nosotros tenemos claro cuales son nuestras prioridades y el camino que tenemos que seguir para proporcionar a los valencianos mejores cuotas de bienestar y prosperidad”.
Asimismo, Bonig ha asegurado que la oposición demuestra una vez más, que no respeta las señas de identidad de los valencianos y que sus intereses políticos no van dirigidos a los ciudadanos sino a gustar a otras formaciones políticas que no respetan a este territorio.
