La Generalitat destruye 10.080 pares de guantes de protección de origen asiático
Se trata de un modelo de prevención de riesgos mecánicos que incumplía la normativa en etiquetado para este tipo de material
Los guantes aún no se habían comercializado y han sido destruidos a propuesta voluntaria de la empresa importadora
En 2013 los servicios territoriales de Inspección de Consumo retiraron del mercado 169.080 productos
La Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo ha destruido hoy 10.080 pares de guantes profesionales de origen asiático, destinados a la protección individual frente a riesgos mecánicos por incumplir la normativa en materia de etiquetado de obligado cumplimiento para este tipo de productos.
Esta actuación ha sido posible por detección de esta irregularidad por parte de los Servicios del SOIVRE y la posterior notificación a los Servicios de Inspección en materia de Consumo de la Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo.
Los inspectores instaron al importador a subsanar esta carencia antes de su comercialización y puesta en el mercado mediante el reetiquetado de los guantes de acuerdo con la norma específica y a la sustitución del folleto informativo por otro que fuera correcto.
Sin embargo, la dificultad y exceso de coste que suponía corregir esta irregularidad ha llevado a la empresa a optar de forma voluntaria por proponer la destrucción de toda la mercancía, lo que demuestra la profesionalidad y responsabilidad de la empresa.
Cabe resaltar la importancia de la colaboración de todas las Administraciones y del sector privado en materia de inspección y consumo para, entre todos, velar conjuntamente por la seguridad del mercado.
Durante 2013 los servicios territoriales de la Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo retiraron del mercado un total de 169.080 productos incluidos en la Red de Alertas del Instituto Nacional de Consumo, de los que 117.221 (el 69,33 % del total) eran juguetes.
Los productos alertados y retirados proceden en su mayoría de países asiáticos. Del total de productos alertados el año pasado 112.078 fueron destruidos, 17.505 fueron retirados voluntariamente por los propios establecimientos o distribuidores y 16.823 por los inspectores y 8.169 fueron devueltos a origen.
