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Gobernación propone tres tipologías de casales falleros que abarca desde los que realizan labores de gestión a los que están abiertos al público general

Gobernación propone tres tipologías de casales falleros que abarca desde los que realizan labores de gestión a los que están abiertos al público general
  • Castellano: “El objetivo es compatibilizar el derecho al ocio y al descanso, proteger la fiesta y velar por la seguridad de los propios falleros”

  • Gobernación constituye una comisión de trabajo con la FVMP, Juntas Locales Falleras y asociaciones de vecinos para consensuar la normativa

El conseller de Gobernación, Serafín Castellano, ha anunciado que la semana que viene se constituirá una comisión de trabajo que estará integrada por la Generalitat, la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, representantes de las Juntas Locales Falleras y las asociaciones de vecinos más representativas de la Comunitat Valenciana “para buscar una solución posibilista a la situación de los casales falleros”.

Castellano ha realizado estas declaraciones tras reunirse con representantes de las Juntas Locales Falleras, y ha manifestado que el objetivo es “compatibilizar el derecho al ocio y al descanso y proteger el arraigo de una fiesta tan importante como son las Fallas, pero también garantizar la seguridad de los propios falleros”.

El conseller ha calificado como “muy fructífera y positiva” esta reunión en la que les ha trasladado la propuesta de la conselleria de Gobernación de establecer una tipología en función de la actividad que desarrollen los casales falleros. En concreto, se barajan tres posibles escenarios, que tal y como ha matizado el conseller, podrían reducirse o ampliarse en función de las propuestas de las partes implicadas, y que tienen en cuenta cuestiones como las actividades a realizar, la temporalidad en su apertura y el público al que se pueden dirigir.

Así, Castellano ha explicado que la primera de estas tipologías comprendería a los casales festeros gestores, en los que únicamente se realizarían tareas de administración y gestión de la entidad social, cultural o festiva, pudiendo disponer del recinto para reuniones y juntas de comisión. El conseller ha matizado que a estos locales no se les aplicaría la Ley  4/2003, de Espectáculos Valenciana.

En segundo lugar, los casales festeros no abiertos a la pública concurrencia, que sin ser considerados como establecimientos públicos podrían realizar actividades lúdicas y de ocio dirigidas únicamente a los miembros de la comisión. En este caso, podrían disponer de ambientación musical, siempre teniendo en cuenta lo dispuesto en la Ley de Protección contra la Contaminación Acústica.

Y por último, los casales festeros abiertos a la pública concurrencia, que además estarían abiertos, habitual u ocasionalmente, al público general y por lo tanto estarían sujetos a la Ley de Espectáculos y deberían respetar criterios de aforo, medidas de evacuación, protección contra incendios, y de aislamiento acústico, entre otras.

Potenciar la fiesta y velar por la seguridad

El conseller de Gobernación ha señalado que cada casal, en función de sus necesidades y actividades, elegirá la tipología a la que se quiere adaptar y ha matizado que dicha adaptación se realizará siguiendo unos plazos que variarán dependiendo de cada tipología en función de los requisitos que deban cumplir.

Asimismo, Castellano ha explicado que esta normativa que ahora se está debatiendo y que será fruto del consenso y la participación de todas las partes implicadas y por ese motivo, se ha formado una comisión de trabajo que se constituirá la próxima semana para abordar detalladamente la regulación de estos locales y en la que estarán representados la Generalitat, las administraciones locales a través de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, asociaciones de vecinos y juntas Locales Falleras.

Además, el conseller ha añadido que esta regulación se hará extensiva al resto de fiestas tradicionales de la Comunitat Valenciana como pueden ser los Moros y Cristianos, la Magdalena o las Hogueras de San Juan.

“En definitiva, de lo que se trata es de respaldar y potenciar las tradiciones y las fiestas de la Comuntat Valenciana pero sin olvidar el respeto al descanso de los vecinos y velar por la seguridad de los propios festeros”, ha concluido Castellano.

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