La crisis retrasa la jubilación voluntaria de los funcionarios
CSIF avisa que en el Ayuntamiento de Valencia sólo el 40% de los trabajadores se retira a los 65 años
Un ejemplo claro se vive en el Ayuntamiento de Valencia. La tendencia experimentada en los últimos tiempos se agrava en éste. Según la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) tan sólo el 40 por ciento de los trabajadores del Consistorio valenciano se retira ya a los 65 años.
“Esta circunstancia afecta sobre todo a empleados de los grupos A y B que prefieren mantenerse en activo porque se sienten con fuerzas y porque, de esa manera, pueden percibir íntegro su salario y no sufrir el recorte de entre el 30 y el 40 por ciento que significa la paga de jubilado, sobre todo en tiempos de crisis como los actuales”, apunta CSIF, quien destaca que este año la tendencia se agudiza por la crisis nacional.
En el Ayuntamiento de Valencia trabajan unas 5.000 personas, de las cuales en torno a 50 cumplen los 65 años en cada ejercicio. Las más propensas a alargar su vida laboral son aquellas que trabajan en oficinas, mientras que las que se han dedicado durante décadas a ejercer tareas de más desgaste físico, como las de bombero o policía, optan por retirarse a los 65 años.
También CSIF detecta una anticipación del cobro de pensión en los funcionarios de grupos C y D, con menores ingresos y, por tanto, con menos rebaja en la jubilación, comparados con los grupos A y B.
Los funcionarios han de solicitar su retirada con tres meses de antelación en la franja de 65 a 70 años. La continuación de la vida laboral durante ese lustro supondrá un respiro para los compañeros de los afectados en numerosas áreas del Consistorio, ya que la precaria situación económica nacional repercutirá en que se congelen las oposiciones y, por tanto, queden frenados los reemplazos para cubrir las futuras vacantes.