Ximo Puig ofrece un “gran pacto” al PP para fijar “los objetivos inmediatos y las prioridades del corredor mediterráneo y alejarlo de la batalla política”

El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha ofrecido hoy al PP “un gran pacto” sobre el Corredor Mediterráneo que “fije los objetivos más inmediatos, las prioridades, y lo aleje de la batalla política porque es una infraestructura irrenunciable para la Comunitat Valenciana y es garantía de desarrollo económico y de generación de puestos de trabajo”. Un pacto, al que se deben sumar también “las demás organizaciones sociales, económicas y políticas dando imagen de unidad y responsabilidad”, y que “se sustentaría sobre la consecución de unos objetivos mínimos y sobre unas prioridades a corto y medio plazo”.

De esta manera se ha referido Puig, después de participar en la Declaración sobre el Corredor Mediterráneo junto al secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, el candidato socialista a la presidencia de la Generalitat de Cataluña, Pere Navarro, el secretario general de los socialistas de Murcia, Rafael González Tovar, y el alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros. En este sentido, ha señalado que para los socialistas “este planteamiento no es nuevo porque desde hace muchos años hemos defendido siempre esta infraestructura por encima de las coyunturas políticas y partidarias”.

Así, ha recordado que hace un año, cuando estaba en el gobierno el partido socialista, el PP hizo una cumbre en Castellón “donde, junto con el alcalde de Tarragona y con otros alcaldes del PP defendimos esta posición” porque, según ha señalado “lo que importa no es quién lo hace sino el contenido”.

Por ello, ha lamentado que “si hoy estamos aquí, en esta situación tan complicada, es porque esta infraestructura debería haber estado acabada desde hace muchos años” y ha advertido de que “uno de los problemas” fue que, en 2003, el gobierno del PP de Aznar “imposibilitó que el Corredor Mediterráneo estuviera donde le tocaba, es decir, que fuera una prioridad de la Unión Europea pero, finalmente, el Ejecutivo de Zapatero lo situó donde tenía que estar”.

Para Puig, el Corredor Mediterráneo es una “cuestión de supervivencia” para “la industria química de Tarragona, por supuesto para la Ford de Valencia, para toda la industria agroalimentaria de Murcia y también para la de Andalucía”. De hecho, ha destacado que el Corredor Mediterráneo es “fundamental para todos” y ha recordado que supone “más del 50% de las mercancías exportadas de España y, por tanto, es un elemento fundamental para la exportación que es la única palanca de salida de la crisis”.

Sin embargo, Puig ha lamentado que “frente a esto tenemos un gobierno del PP que está actuando de una manera clara y directa para interferir y no hacer posible este avance” y esto, según ha indicado “lo vemos en los presupuestos, no hablamos de palabras sino de hechos y de la realidad”.

Por último, también ha querido recordar que Convergencia i Unió “ha defendido siempre el Corredor Mediterráneo desde Barcelona hacia la frontera pero nunca ha estado en una posición clara de defensa de todo el conjunto de esta infraestructura”. Puig ha hecho referencia a este aspecto para destacar que los socialistas no quieren “ninguna frontera, sino todo lo contrario, que haya una línea muy recta de progreso en todo lo que significa el Corredor Mediterráneo”.