Bonig lleva a Bruselas las claves del Anteproyecto de Ley Urbanística que está ultimando el Consell
La Comunitat Valenciana es la primera autonomía en incorporar desde el principio del proceso los criterios ambientales
La nueva Ley otorga más autonomía a los municipios, a quienes corresponderá la aprobación definitiva de los planes
La consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, viajará a Bruselas la próxima semana para informar a los responsables en materia de ordenación del territorio y de medio ambiente de las instituciones europeas sobre las líneas básicas del Anteproyecto de Ley Urbanística Valenciana, que está ultimando el Consell.
Una de las novedades más destacadas de la normativa es la integración de la evaluación ambiental en el procedimiento de elaboración y aprobación de los planes urbanísticos. De hecho, según ha explicado Bonig, la valenciana es “la primera autonomía en incorporar desde el principio del proceso los criterios ambientales, territoriales y funcionales que acompañan al plan a lo largo de todo su proceso de elaboración, tal y como establece la Unión Europea”.
Con la nueva Ley, “la evaluación ambiental estratégica no será un proceso separado de la elaboración del plan sino la forma de elaborarlo, es decir, el procedimiento para decidir sus contenidos y no un mero trámite final”, ha explicado Bonig.
“Si bien –ha continuado la consellera- las infraestructuras de ingeniería civil han sido tradicionalmente el elemento articulador más relevante de la ordenación del territorio a escala supramunicipal, la nueva Ley incorpora la Infraestructura Verde como referencia, teniendo en cuenta el porcentaje inusualmente elevado de suelo protegido”.
Según ha explicado Bonig, partiendo de las cartografías de suelos protegidos y de riesgo de la Generalitat, “cada plan municipal habrá de delimitar y ordenar la Infraestructura Verde a su escala propia, como marco articulador de las propuestas de ordenación urbana, lo que implica un ejercicio de coordinación de la escala municipal con la supramunicipal”.
Con la nueva legislación, todos los informes sectoriales se integrarán desde las etapas previas, a fin de simplificar y evitar duplicidades, que es otro de los principales objetivos de la nueva Ley, y que implicará que los tiempos de elaboración de los planes se acorten, evitando atascos burocráticos que afectan a las decisiones de inversión y al interés ciudadano.
Por otra parte, y con la misma finalidad de conseguir un planeamiento más sostenible, la nueva regulación favorecerá los procesos de rehabilitación de la edificación, renovación urbana y de mejora de la calidad de la ciudad, limitando los grandes crecimientos que ocupen nuevas áreas del territorio. En este sentido, el nuevo modelo urbanístico se ajusta a la realidad socioeconómica actual y a los criterios en que se basa la futura directiva sobre ocupación de suelo de la Unión Europea
Mayor autonomía para los municipios
Otra de las novedades de la Ley es la dotación de mayor autonomía a los municipios en el proceso de elaboración de los planes generales, de manera que tengan mayor responsabilidad sobre sus territorios.
“Además, a partir de ahora, les corresponderá a los ayuntamientos la aprobación definitiva de los planes, siempre con la supervisión de la Generalitat, como se ha realizado hasta el momento”, ha explicado Bonig.
La Ley prevé también incorporar criterios de flexibilidad en la elaboración dichos planes para una mayor adaptación a la realidad de los municipios, en especial de los más pequeños.
