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Joaquín Martínez: “Los profesionales valoran la dependencia de acuerdo a los criterios establecidos por un real decreto del Gobierno Central”

Joaquín Martínez: “Los profesionales valoran la dependencia de acuerdo a los criterios establecidos por un real decreto del Gobierno Central”
  • El baremo acordado por el Consejo Territorial del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia es igual para todas las comunidades autónomas

  • A la hora de valorar “se tiene en cuenta el grado de autonomía para realizar tareas básicas de la vida diaria”

  • El 89% de las personas está de acuerdo con el grado y nivel que se les ha dictaminado

El secretario autonómico de Autonomía Personal y Dependencia, Joaquín Martínez, ha asegurado que los profesionales de la Conselleria de Justicia y Bienestar Social encargados de valorar el grado y nivel de dependencia de las personas que lo solicitan, “se basan en los criterios establecidos en el Baremo de Valoración de la Dependencia (BVD), aprobado por el Gobierno Central en un real decreto, y de igual aplicación para todas las comunidades autónomas”.

El secretario autonómico y personal técnico de los órganos de valoración de la Conselleria de Justicia y Bienestar Social, han explicado en rueda de prensa el Baremo de Valoración de la Dependencia (BVD) que los profesionales utilizan para determinar la dependencia y/o autonomía de las personas que solicitan la ley de Dependencia.

Un baremo igual para todas las comunidades
La ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las Personas en situación de Dependencia establece que le corresponde al Gobierno Central la aprobación de un reglamento que establezca el baremo para la valoración de los grados y niveles de dependencia. De acuerdo con el Consejo Territorial del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), el Gobierno aprobó el BVD con una serie de criterios objetivos que evalúan el grado de autonomía para realizar tareas básicas de la vida diaria y la necesidad de apoyo para hacerlo.

En su intervención, Joaquín Martínez ha subrayado que el baremo “es igual para todas las comunidades autónomas” y de hecho, “el porcentaje de personas valoradas en la Comunidad Valenciana en cada uno de los grados de dependencia, es igual a la media española”.

Efectivamente, del total de personas valoradas en todo el país, el 28% corresponden a grandes dependientes, el 30’5% a dependientes severos y el 26% a dependientes moderados, mientras que en la Comunidad Valenciana de todas las valoraciones el 27’7% son grandes dependientes, el 29’9% severos y un 25’3% dependientes moderados.

Asimismo, el secretario autonómico ha señalado que actualmente, “de todas las personas que han sido valoradas en nuestra comunidad, el 89% está de acuerdo con el grado y nivel que se les ha comunicado mediante resolución, puesto que sólo se han solicitado revisiones en 16.995 casos”.

Órganos de Valoración
Los profesionales que integran los órganos de la Comisión de Valoración de la dependencia de la Conselleria de Justicia y Bienestar Social son funcionarios de carrera con titulación superior sociosanitaria, concretamente médicos y psicólogos. “Todos ellos poseen un conocimiento riguroso de la norma que regula la valoración y el baremo y, por lo tanto, están instruidos en su manejo y en el manejo de las fuentes de recogida de la información” ha señalado el secretario autonómico.

A la hora de aplicar el Baremo para la Valoración de la Dependencia, los técnicos tienen en cuenta el nivel de autonomía para realizar las actividades de la vida diaria, entendiéndose como tales, “aquellas actividades que una persona realiza diariamente para poder vivir de forma autónoma, integrada en su entorno habitual y cumpliendo su rol social”.

Durante la rueda de prensa, los técnicos han hecho hincapié en la distinción entre discapacidad y dependencia. La primera es una limitación, consecuencia de una deficiencia, en la capacidad de realizar una actividad dentro del margen considerado normal para el ser humano, mientras que la dependencia, según establece la Ley y el BVD, “es el estado por el que debido a la falta o pérdida de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, se precisa la atención de otra u otras personas o ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria”.

Concretamente, el baremo contempla 11 actividades: comer y beber; higiene personal relacionada con la micción y defecación; lavarse; realizar otros cuidados corporales; vestirse; mantenimiento de la salud; cambiar y mantener la posición del cuerpo; desplazarse dentro del hogar; desplazarse fuera del hogar; realizar tareas domésticas y tomar decisiones. En total se puntúan 60 tareas.

El secretario autonómico ha explicado que todas estas actividades son valoradas de acuerdo a la Ley, “y da como resultado una puntuación matemática que, junto al informe médico, el informe del entorno, la entrevista y todo informe que se considere necesario para la evaluación del solicitante, dará un grado y nivel de dependencia”.

La puntuación obtenida permite determinar las situaciones de dependencia moderada, dependencia severa y gran dependencia. Asimismo, cada grado se clasifica en dos niveles en función de la autonomía de la persona y de la intensidad del apoyo que requiere.

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