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La ingesta de alcohol en el embarazo y la lactancia puede provocar malformaciones, abortos y bajo peso al nacer

La ingesta de alcohol en el embarazo y la lactancia puede provocar malformaciones, abortos y bajo peso al nacer
  • Nela García ha inaugurado la Jornada Consumo de alcohol durante el embarazo y la lactancia

  • La secretaria autonómica: “se desconoce cuánto alcohol puede ser dañino para el bebé por lo que el consumo cero es lo único seguro”

  • El trastorno del espectro alcohólico fetal (TEAF) establece una variedad de trastornos permanentes del desarrollo del neonato

La ingesta de alcohol durante el embarazo y la lactancia puede provocar problemas en el desarrollo del niño. Así lo ha indicado la secretaria autonómica de la conselleria de Sanitat, Nela García, quien ha indicado que “la evidencia científica sobre la relación entre el consumo de alcohol y los numerosos perjuicios sobre la salud de la embarazada, el nonato y el recién nacido, así como sus repercusiones en el desarrollo social del niño, es incuestionable”.

Nela García ha inaugurado la Jornada Consumo de alcohol durante el embarazo y la lactancia, una jornada formativa incluida en el programa de prevención de consumo de alcohol en embarazadas, que desarrolla por segundo año consecutivo la conselleria de Sanitat en colaboración con el Plan Nacional sobre Drogas y la Universidad de Valencia.

La secretaria autonómica de Sanitat ha destacado que dentro del ámbito de la prevención destacan las acciones dirigidas a sensibilizar e informar a los distintos sectores sociales sobre los riesgos a los que puede conducir el consumo de drogas. En este ámbito se enmarca esta Jornada en la que se trata de informar de los riesgos de la ingesta de alcohol sobre el feto o recién nacido.

En este sentido, García ha destacado que consumir alcohol durante la gestación puede provocar abortos, malformaciones y bajo peso al nacer. El trastorno del espectro alcohólico fetal (TEAF) supone una variedad de trastornos permanentes del desarrollo provocados por la ingesta de alcohol de la madre durante el embarazo, como son las discapacidades físicas (malformaciones faciales y afectación del sistema nervioso) y discapacidades psíquicas (problemas de conducta y de aprendizaje). Además, durante la infancia y la adolescencia aumenta el riesgo de consumo de alcohol u otras sustancias psicoactivas y en el desarrollo de actividades delictivas.

La secretaria autonómica de Sanitat ha señalado que “se desconoce cuánto alcohol puede ser dañino para el bebé por lo que el único consumo seguro es el consumo cero”.

En este sentido, García ha apelado a la responsabilidad compartida, ya que el entorno de la mujer embarazada (familia, amigos, profesionales de la sanidad, etc) son los que ayudan a modificar el hábito del consumo de alcohol en las madres gestantes”.

La secretaria autonómica de Sanitat ha mencionado el Plan Estratégico de Drogas y Trastornos Adictivos 2011-2015 de la Conselleria de Sanidad, presentado en junio 2011 y ha resaltado la excelente labor que están realizando todos los profesionales implicados.

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