Císcar: “Intentaremos conseguir el máximo consenso para desarrollar los planes de plurilingüismo y contra el fracaso escolar”

El conseller de Educación, Formación y Empleo, José Císcar, ha ratificado su voluntad de llevar adelante con el “máximo consenso” las líneas de actuación en las que trabaja su departamento para continuar con el proceso de implantación del plurilingüismo en el sistema educativo y para impulsar el plan estratégico contra el fracaso escolar.

José Císcar se ha pronunciado en estos términos tras la reunión mantenida con el President de la Generalitat, Alberto Fabra, dentro de la ronda de contactos que está manteniendo el jefe del Consell con los diferentes miembros de su Gobierno.

Císcar ha destacado que va a tratar de conseguir “el mayor consenso posible entre la comunidad educativa y entre todos los que tienen que ver con la educación de nuestros hijos” a la hora de llevar adelante las medidas para favorecer el plurilingüismo.

Para ello, “después de poner en marcha el curso escolar en el mes de septiembre, desde la Conselleria vamos a iniciar ya esa ronda de mesas de trabajo con organizaciones sindicales, empresarios de la enseñanza, representantes de padres y madres de alumnos, familias y equipos directivos de los centros, es decir, con todos aquellos que tienen algo que decir y aportar” en el ámbito educativo, ha precisado.

Císcar ha añadido que también se va a “implicar a todos los que tienen que ver con la educación de nuestros alumnos” en el plan estratégico contra el fracaso escolar. “Creemos que es un plan muy importante, amplio, ambicioso y lo queremos tener en el menor tiempo posible”, porque “cuanto antes lo tengamos y lo pongamos en marcha, antes podremos luchar contra el fracaso escolar”.

El conseller ha reiterado que, respecto a este asunto, “no hay diferencias significativas entre las distintas comunidades autónomas”, pero, según ha argumentado, mientras exista fracaso escolar, “estamos obligados a abordar la cuestión y a tomar las medidas que sean necesarias”. “Tenemos que luchar contra la desmotivación de los alumnos, contra el abandono temprano de los colegios e institutos y ahí tenemos que implicar a la comunidad educativa, porque son los centros los que mejor saben lo que tenemos que hacer para reducir al máximo el fracaso escolar”.

También se ha abordado en la reunión la implantación de Centros de Iniciativa Social (CIS). A este respecto, el conseller ha indicado que “tenemos un importante desequilibrio en la Comunitat Valenciana entre centros públicos y privados y concertados”. Según ha remarcado, “no se trata de llegar al 50%”, porque “tampoco es lo que queremos, pero sí queremos reducir el desequilibrio actual”.

Asimismo, se ha mostrado partidario de una reforma de la Formación Profesional, tanto de la reglada como de la no reglada, para “conseguir una formación que sea dual, que no sea solo en las aulas, sino ya directamente en los centros de trabajo, y además tenemos que conseguir –ha indicado- que, dentro de las estrecheces inevitables en la Administración pública, que sea un sistema lo más flexible posible para poder adaptarnos en cada momento a las demandas del mercado laboral, que siempre son cambiantes, y para poder adaptarnos a los nuevos nichos de empleo que en cada momento vayan surgiendo”.

“Nos estamos viendo en estos momentos desbordados por la petición de plazas en el sistema de Formación Profesional”, ha argumentado el conseller, quien ha añadido que, a pesar de haberse incrementado notablemente el número de ciclos y de grupos, la demanda en los últimos dos años está siendo “muchísimo mayor que lo que hace algunos años se podía prever”. Atender a ello constituye, según ha defendido, un “reto” porque “los jóvenes se conciencian cada vez más de que para tener opciones de ingresar en el mercado de trabajo y ser competitivos necesitan estar lo mejor formados posible”.

Además, ha agregado, “estamos hablando de una educación y formación que, además de las enseñanzas clásicas regladas, permita introducir en nuestros jóvenes el fomento de determinadas habilidades para el emprendedurismo”, de forma que “lleguen a la edad adulta no solo pensando en una salida para su vida trabajando en una empresa por cuenta ajena, sino creando su propia empresa”.

“En eso vamos a trabajar, pese a las dificultades económicas del momento, y creemos que tenemos margen para poder implantar todo ello en un periodo de tiempo más que razonable”, ha agregado.