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Sanitat inicia el programa frente a temperaturas extremas ante un verano ligeramente húmedo y más fresco

Sanitat inicia el programa frente a temperaturas extremas ante un verano ligeramente húmedo y más fresco
  • Cervera ha presentado el programa elaborado conjuntamente con el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo

La previsión de los expertos para el próximo verano es que será ligeramente húmedo y con temperaturas más bajas respecto a los períodos estivales de 2009 y 2010. Así lo ha puesto de manifiesto el conseller de Sanitat, Manuel Cervera, en la presentación del Programa de actuación frente a Temperaturas Extremas para 2011, que se ha activado hoy y que se extenderá hasta el próximo 30 de septiembre.

Cervera ha destacado que “este programa se activa cada verano desde el año 2004, con objeto de prevenir, minimizar y evaluar los impactos en la salud de la población derivados de las altas temperaturas en la Comunitat, con especial atención a la posible aparición de olas de calor”.

El titular de Sanitat ha estado acompañado por el director ejecutivo de la Fundación del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), Millán Millán, institución que colabora con Sanitat en la elaboración del programa desde 2006, año en el que comienza a utilizarse un sistema propio de vigilancia metereológica para la Comunitat frente a los años anteriores, en los que el programa estaba basado en información del Instituto Nacional de Meteorología.

De este modo, frente a la división en tres provincias del Plan Nacional de Actuación, se dividió la Comunitat en 30 zonas termoclimáticas con características propias, y con umbrales de riesgo específicos para cada zona termoclimática, lo que permite establecer actuaciones adaptadas a las necesidades locales Asimismo, el pronóstico de temperatura es para 3 días consecutivos, frente a los 5 días que ofrece el Plan Nacional del Ministerio, y la información está disponible y actualizada diariamente en www.san.gva.es y www.sp.san.gva.es/calor.

Cervera ha explicado que todos los días se elaboran mapas de riesgo que muestran los niveles de intervención para cada zona según los datos de temperatura. Así, cada uno de los niveles (verde, amarillo, naranja y rojo) lleva asociadas una serie de actuaciones en salud pública.

Se considerarán los niveles de riesgo climatológicos como de actuación en salud pública cuando las predicciones sean del mismo nivel en los dos primeros días (“HOY” y “MAÑANA” con el MISMO COLOR) mientras que un único día en un nivel superior implicará sólo un estado de alerta para atender a la posible concreción del exceso de temperaturas. La Dirección General de Salud Pública, como órgano responsable de las actuaciones, podrá incrementar los niveles de riesgo previstos por sistema de vigilancia meteorológico, si la información sanitaria así lo aconseja.

Además de la vigilancia sanitaria de las temperaturas, Sanitat informará a los ciudadanos con las medidas y recomendaciones que se ofrecen a través de la edición de más de 38.000 folletos y cerca de 1.700 carteles distribuidos en centros sanitarios, así como a través de la web de la conselleria de Sanitat y el portal sanitario www.cuidatecv.es.

Golpe de calor
El golpe de calor es un cuadro médico grave que se produce cuando el cuerpo no es capaz de regular su propia temperatura. Los efectos que puede provocar son deshidratación, insolación, cefalea, fatiga, calambres musculares, náuseas, taquicardia, ahogo y pérdida de consciencia, coma e, incluso, la muerte.

Los departamentos de salud informan a la conselleria de cualquier sospecha de afectación por golpe de calor. En el pasado año, se registraron 14 ingresos por golpe de calor, de los que fallecieron 4 personas.

Grupos de riesgo
Ante las temperaturas elevadas, los grupos de riesgo a los que hay que prestar especial atención son las personas mayores, que son más vulnerables, ya que sus sistemas de termorregulación son menos eficientes y pueden presentar dependencia física; las personas con enfermedades crónicas (diabetes, insuficiencia cardíaca, respiratoria, renal, hepática,…), que pueden descompensar su situación clínica y empeorar súbitamente por el calor; los niños, las personas con movilidad reducida o con obesidad, los deportistas y las personas que realizan trabajos o esfuerzos físicos importantes soportando altas temperaturas.

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