LA UNIÓ considera inaceptable la renuncia del Gobierno a demandar a Alemania a pesar de las importantes pérdidas
Insta a los productores a hacerlo pero él se “acobarda” ante Alemania
La crisis va en aumento y se pone en peligro la exportación de productos valencianos de temporada
LA UNIÓ de Llauradors considera inaceptable que el Gobierno español haya renunciado a demandar a las autoridades alemanas por las importantes pérdidas económicas que han comportado sus acusaciones contra los productos españoles en la crisis del pepino, a pesar de dejar la puerta abierta a los productores para plantear demandas ante los tribunales alemanes.
LA UNIÓ cree que el Gobierno debería exigir responsabilidades a las autoridades alemanas porque desde que empezó esta crisis nuestras exportaciones hortofrutícolas han caído prácticamente en su totalidad y existe el riesgo de que se produzcan desviaciones masivas de mercado hacia otros países si continúa la bajada, tal y como ya se viene detectando. Gran parte de la producción de la Comunitat Valenciana de temporada, como algunas hortalizas o las frutas características del verano destinadas a los mercados europeos, tienen serias dificultades de salida a los mercados.
Para LA UNIÓ tampoco es suficiente el compromiso del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) de realizar una campaña estatal para reactivar el consumo hortofrutícola como compensación por los daños y perjuicios sufridos y que todavía están sufriendo los productores, ya que al final los fondos siempre salen del mismo lado y Alemania y la Unión Europea se lavan las manos.
LA UNIÓ de Llauradors alienta a la Generalitat, si no lo hace el Gobierno español, a exigir responsabilidades a las autoridades alemanas si finalmente no se consiguen unas compensaciones dignas para los productores valencianos. LA UNIÓ celebra que la Conselleria de Agricultura disienta del Ministerio, en la misma línea mantenida por esta organización desde el comienzo de la crisis para reparar unas pérdidas económicas todavía incalculables; aunque le pide que pase de las palabras a los hechos ante Alemania y la Unión Europea.
LA UNIÓ también lamenta la falta de firmeza por parte de la Unión Europea a la hora de fijar la cuantía de las indemnizaciones, en 150 millones de euros en una primera valoración y en 250 en la segunda, cifras que siguen siendo del todo insuficientes por cubrir las importantes pérdidas que han sufrido y sufrirán los productores.
Es inaceptable la propuesta de la Comisión Europea de articular un mecanismo de retirada de producción mediante el presupuesto de las Organizaciones de Productores de hortalizas, puesto que en la Comunitat Valenciana la mayor parte de los agricultores no están organizados en las mismas y por lo tanto este sistema no sirve por indemnizar a los productores valencianos.
