Císcar: “Alarte impone su régimen inquisitorial para sentirse arropado tras la derrota”
Císcar se ha pronunciado así respecto a la “purga” que pretende hacer Alarte en las listas socialistas, de las que “quiere cargarse sin contemplaciones a todo aquel que no le rinde pleitesía e incluso tiene la intención de acabar con su antecesor Ignasi Pla y, por supuesto, con quien hizo tambalear sus aspiraciones a la secretaría general, Ximo Puig”.
“Está claro que pese a que Alarte se haya dedicado casi en exclusiva durante estos más de dos años a intentar aplacar los ánimos de todos sus oponentes internos, sus políticas no han calado y no ha logrado la integración de nadie”, ha apuntado Císcar, quien ha añadido que “los trapicheos con los que ha jugado con sus oponentes internos tenían fecha de caducidad”.
De esta forma, ha sostenido que “el nerviosismo de Alarte ante el descalabro electoral que le viene encima, le hace imponer ahora una lista de afines para evitar que sus compañeros le den una patada el 23 de mayo y le hagan naufragar en su propio partido”.
Para el dirigente popular, se trata de “un golpe encima de la mesa propio de un despotismo desmesurado, ya que no sólo saca el hacha en Valencia y Castellón sino que hoy también romperá en mil pedazos la propuesta de los socialistas alicantinos porque es incapaz de llegar a un acuerdo ni siquiera en el seno de su partido”.
Finalmente, Císcar ha asegurado que los socialistas “no tienen nada que ofrecer porque no pueden llegar a acuerdos ni siquiera entre ellos mismos, se dedican a imponer propuestas y solucionar sus problemas, por lo que lo único que podrían hacer en la Generalitat sería convertir la Comunitat en una república bananera”.
