Así funcionan los puntos violeta para prevenir agresiones en los festivales de la C. Valenciana
La finalidad de estos espacios es la de concienciar, prevenir y disfrutar la fiesta bajo el respeto hacia las mujeres
Los puntos violeta son espacios, en los que se sensibiliza al público, y se atiende, informa y ayuda a víctimas de cualquier tipo de agresión sexista. Su finalidad por tanto es la de concienciar, prevenir y disfrutar la fiesta bajo el respeto hacia las mujeres, libres de acoso y humillación machista. Es un lugar donde encontrar apoyo psicológico y para ayudar a denunciar.
Esta iniciativa forma parte del catálogo de medidas urgentes del Plan de Mejora y Modernización impulsado por distintos ministerios del Gobierno de España que supone un cambio de enfoque en las políticas públicas de atención a las víctimas, situando la violencia machista como un problema estructural que requiere de la implicación del conjunto de la sociedad para acabar con ella.
Las trabajadoras de los Puntos Violetas son voluntarias que normalmente son profesionales del mundo de la psicología o trabajo social. Así nos lo explican Eva Linares y Paula Andrés, quienes han estado durante todo el festival del Arenal Sound ofreciendo este servicio a disposición de todos los asistentes poniendo dos `puntos violeta´ repartidos entre la zona de descanso y el recinto de conciertos, "no han venido muchas chicas a denunciar situaciones machistas en el camping aunque alguna chica sí que nos ha notificado alguna situación incómoda. Aquí sobre todo vienen a preguntar por información. En el recinto de conciertos sí que se han notificado más denuncias". Este puesto de seguridad se promueve mediante la Generalitat Valenciana y el Ministerio de Igualdad. A su vez se coordinan junto con la seguridad del camping, la policía y, en este caso, con la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de Castelló.
Pinchazos
"Se han notificado algunos casos de pinchazos aunque no todos lo son pero es que esta situación es muy peligrosa. Ante la duda hay que acudir al Punto Violeta o a cualquier profesional que te pueda ayudar", explican las trabajadoras.
Este método de sumisión química, se administra inyectando la burundanga u otra sustancia similar en una copa, provoca una pérdida de conciencia de la víctima, con el objetivo de cometer una agresión sexual.
En caso de sentir que se puede haber sufrido esa intoxicación debe pedirse ayuda a la seguridad del local o Punto Violeta e ir a un centro sanitario para que se extraiga una muestra de sangre, que servirá para la denuncia en su caso.
Según los datos de la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana se han registrado siete denuncias por sumisión química a través de pinchazos a mujeres en las provincias de Valencia y Castellón.
Por ello la Conselleria de Sanidad y Salud Universal presentará el nuevo protocolo establecido para la atención a víctimas de sumisión química a través de pinchazos.
Atención a víctimas de violencia de género: 016.
