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Muse revoluciona el FIB y Kendrick Lamar pone el broche final

  • El FIB cierra con el cartel de “no hay entradas” y con la cifra de 170.000 espectadores durante los cuatro días

El FIB 2016 finaliza con cifras inmejorables. Alrededor de 170.000 espectadores, llegados el 48% de Reino Unido y el 46% del territorio nacional, han pisado Benicàssim durante estos últimos cuatro días para disfrutar de un cartel magnífico que ha hecho vibrar, en cada momento, el recinto de conciertos de la Costa Azahar.

El director del festival, Melvin Benn, describió la pasada tarde frente a los medios de comunicación sentirse “extremadamente feliz” con el balance de esta edición. Un FIB que ha abierto sus fronteras, acercándose a un abanico más amplio de edades con estilos musicales renovados como la electrónica, el indie o el hip-hop, pero siempre sin olvidarnos del rock, género que lo alzó a escala internacional a conquistar las antípodas, convirtiéndolo en cita ineludible en los festivales de música europeos. Por resurgir de entre sus cenizas y alzarse con éxito, el FIB 2016 cierra su temporada con el cartel de “no hay entradas”.

Pero la base de un festival hay que agradecérselo al cartel, con artistas como Major Lazer y Chemical Brothers que hicieron remover los cimientos del recinto. Pero siempre sin olvidarse del panorama nacional con grupos y artistas tan consolidados como Dorian durante la jornada del viernes o el concierto de Zahara y la banda vasca Delorean durante el sábado.

Aunque los internacionales copan el terreno con grupos musicales como The Kills, Disclosure, The Maccabees o The 1975. Pero sin duda, quien atrajo todas las miradas de la jornada del sábado fueron la esperada y legendaria banda británica Muse, con unos 46.000 espectadores durante su exhibición de rock en estado puro en el escenario principal del FIB. Los fibers bailaron frenéticamente cada uno de los clásicos que retumbaban en el recinto como “Dead Inside” o “Psycho”, así como los temas de su séptimo álbum “Drones”. Una clase magistral de rock que revolucionó a todo el público en masa.

Nadie quiso perderse a Muse, por eso no nos extraño ver entre la multitud a personajes públicos de la escena política como el líder del PSOE nacional, Pedro Sánchez, así como a la Vicepresidenta de los Estudios y Programas del Partido Popular, Andrea Levy y a la Presidenta de los populares valencianos, Isabel Bonig.

Pero la pasada noche, los fibers tuvieron que despedirse de estos cuatro días intensos de fiesta con el impulso poético del hip-hop de Kendrick Lamar con las canciones de uno de los discos más destacados en la escena internacional del último año “To Pimp a Butterfly”.

A lo largo del día de hoy, Benicàssim volverá a recuperar la normalidad, cerrando durante unos días su mítico velódromo que hace las dotes de sala de conciertos. Pero el FIB no se acaba aquí y esta misma semana el festival activará los motores para el 2017, sacando sus entradas a la venta para el próximo verano.

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