La campaña de setas se presenta hoy en el Ayuntamiento

El concejal de medio ambiente, Rafael Pallarés, presentará la campaña de recogida de setas a las 13 horas. La principal novedad del presente año, es que algunos propietarios privados pueden declarar su finca como Lugar de Interés Comunitario. No obstante, esta nueva normativa sólo afecta al término de Morella que está situado en el Monte de Vallivana. Además, este Monte tiene pocas fincas privadas, por lo que pocos propietarios pueden acoger se a la medida.

Cabe destacar que al Monte público puede acceder cualquier particular. Los montes públicos del término de Morella son Pereroles, Carrascals, Monte de Vallivana, Herbeset y Ortells. Los dos primeros suelen ser los que más recolectores congregan durante la campaña. El Monte de Pereroles, también está más frecuentado por visitantes porque en él hay tres refugios rurales, en los que se puede hacer noche.

A parte de esta orden aprobada por Consellería de Medio ambiente el pasado invierno, la recogida de setas en la presente campaña no sufrirá variaciones. El Ayuntamiento de Morella no tiene una normativa específica, hecho que hace que se acoja a la Ley de 16 de septiembre de 1996, de la Consellería de Agricultura y Medio Ambiente. Esta ley promueve una recogida de setas y otr os hongos de una forma cívica e intentando no dañar el medio ambiente. Por eso, las limitaciones más importantes a la hora de recoger setas o similares, son que no se puede llevar a cabo esta actividad entre el anochecer y el amanecer, que sólo se pueden coger seis kilos por persona y día y que no se pueden arrancar las distintas variedades. Esto se debe a que una cantidad mayor a la indicada se considera un aprovechamiento comercial y, éste tiene otras restricciones. Además, el hecho de que se corte la seta por el micelio es para no remover el suelo. Por lo que respecta al equipamiento que ha de llevar un recolector, se exige que la navaja no exceda de 11 centímetros de longitud y que se lleve una cesta de mimbre, paja, caña o similares, para así, dejar que las esporas se repartan por todo el monte.