elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià

Un 96,7 por ciento de los gatos sufre hipotermia en las intervenciones veterinarias que requieren anestesia

Un 96,7 por ciento de los gatos sufre hipotermia en las intervenciones veterinarias que requieren anestesia
  • Una investigación de la CEU-UCH muestra la elevada prevalencia de esta complicación anestésica, que en los humanos aparece entre el 30 y el 60 por ciento de los casos

  • Los autores del estudio recomiendan a los veterinarios un mayor control de la temperatura de los gatos, antes y durante las intervenciones con anestesia, especialmente en animales de menor tamaño y en las operaciones más largas

  • Las intervenciones abdominales y ortopédicas generan un mayor descenso de la temperatura corporal en los gatos que las operaciones menores o las pruebas diagnósticas realizadas también bajo los efectos de la anestesia

La hipotermia es una complicación muy frecuente tras una intervención quirúrgica, por la combinación del efecto de la anestesia y las bajas temperaturas que se mantienen en los quirófanos. En los humanos, entre el 30 y el 60 por ciento de los pacientes que ingresan en unidades de cuidados intensivos tras una intervención quirúrgica registran una temperatura inferior a los 35 grados. Sin embargo, no existía hasta el momento ningún estudio que documentara clínicamente la prevalencia de la hipotermia en los gatos tras una intervención quirúrgica. El equipo de investigación de la CEU-UCH que dirige el profesor José Ignacio Redondo ha publicado en la revista Veterinary Record el trabajo “Retrospective study of the prevalence of postanaesthetic hypothermia in cats” para analizar la prevalencia de la hipotermia en estos animales.Los investigadores de la CEU-UCH que integran el Grupo de Investigación sobre Avances en Anestesia, Analgesia y Monitorización han estudiado un total de 275 gatos anestesiados en el Hospital Clínico Veterinario de la UCH. En estos animales la necesidad de emplear la sedación es frecuente en muchas de las intervenciones veterinarias practicadas, dado que los gatos son los animales domésticos más difíciles de manejar y que presentan más nivel de estrés en la clínica veterinaria. La temperatura de los animales estudiados fue registrada antes de la anestesia y cada 5 minutos desde su administración, a lo largo de la intervención practicada. La prevalencia de la hipotermia fue de carácter leve en el 26,5 por ciento de los casos; moderada en el 60,4 por ciento de los gatos y severa en el 10,5 por ciento de los gatos estudiados. En total, registraron algún grado de hipotermia tras la administración de la anestesia el 96,7 por ciento de los gatos.

Factores para prevenir la hipotermia en gatos
El estudio identifica también los distintos factores asociados a la evolución de la temperatura corporal en los gatos durante las intervenciones que requieren anestesia. La temperatura previa a su administración es uno de los principales elementos que protegen de la hipotermia a estos animales durante las intervenciones, por lo que los autores del estudio recomiendan a los veterinarios que los gatos tengan la temperatura corporal adecuada antes de iniciar la intervención para evitar esta complicación. También para reducir la prevalencia de la hiportermia, los investigadores de la CEU-UCH autores del estudio proponen un mayor control de la temperatura, no sólo antes, sino también durante las intervenciones con anestesia, especialmente en el caso de los gatos de menor tamaño y en las intervenciones de mayor duración.

De hecho, la investigación ha demostrado también que las intervenciones abdominales y ortopédicas generan un mayor descenso de la temperatura corporal en los gatos que las operaciones menores o las pruebas diagnósticas realizadas también bajo los efectos de la anestesia. Además, los gatos con un mayor riesgo anestésico presentan más dificultades para mantener su temperatura corporal y sufren, por tanto, más hipotermia que los pacientes con un riesgo bajo. La duración de la anestesia es también otra variable significativa asociada a la hipotermia como efecto secundario de la anestesia, que los veterinarios deben tener en cuenta en las intervenciones sobre estos animales.

El estudio ha sido realizado, bajo la dirección del profesor José Ignacio Redondo, junto a los investigadores Carme Soler, Laura Gil e Iván Serra, profesores del Departamento de Medicina y Cirugía Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia, y con la colaboración de los veterinarios Gaspar Soler y Pablo Suesta. Este Grupo de Investigación sobre Avances en Anestesia, Analgesia y Monitorización, integrado en el Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia ultima también un estudio de similares características para determinar el riesgo de hipotermia en perros en las intervenciones que requieren anestesia.

Subir